- ¿Pinky y si vamos a la plaza?... además ya acabamos los frappes
- Espera, espera, me pediré uno de Oreo, quiero probarlo, dicen que está en algo
- Esta bien pero pídeme uno de moka y este va a tu cuenta, por haberme hecho esperar.
- Ya, ya, está bien.
Mientras su amiga pedía los frappes, ella empezó a ver su celular y por curiosidad entro al whatsapp y se dio cuenta que él ya había leído su mensaje, que se encontraba en línea y no le respondía aun.
"De seguro debe estar ocupado, además debe estar pasándolo con su nueva pareja, mejor no le insisto, ya responderá en la noche o cuando tenga tiempo"
Soltó un suspiro involuntario y al terminarlo llego su pinky.
- Hey chica de los suspiros, acá esta su pedido, ahora si vamos a la plaza a distraernos un poco.
- Gracias beffy... Si, si, vamos además que aprovechamos el atardecer.
- A todo esto ¿qué hora es?
- Las 5:37, así que estamos a tiempo.
- Ya, ya, vamos rápido que me gusta cómo se pintan las nubes de anaranjado en el atardecer.
***
- Bueno ya está, puedes llamar sin ningún problema Aisa
- Ummm. ¿Seguro?, el mensaje parecía importante
- Descuida, primero llama y de ahí ya veré que hago
- Esta bien y disculpa por leerlo
- No te preocupes, ya paso
Así que Aisa tomo el celular e hizo su llamada mientras él pensaba en que debía hacer después de haber leído el mensaje.
"Ahhhhhhh... ¿Qué debo hacer? ¿Porque no le respondí de inmediato?... Todo por no ver mi celular, soy un tonto de verdad... ¿Cómo le respondo? ¿Qué le digo?"
En eso Aisa acabo su llamada y chasqueo los dedos para captar la atención de él.
- Hey ¿Estás aquí?
- ¿Ha?... disculpa andaba pensando
- ¿Es por el mensaje?
- Tú tranquila y yo nervioso
- Esta bien, gracias por prestarme tu celular – en ese momento le devolvió el celular y él se quedó un rato viéndolo sin saber que hacer.
- ¿Seguro que estas bien?
- ¿Ha?... ummm... sabes Aisa, creo que debo irme... gracias por el baile y por la compañía, de verdad lo pase muy bien contigo, fue un gusto conocerte.
- Espera, no prefieres que te acompañe, con tal solo vine para conocerte y si te vas me aburriré en esta fiesta.
- Me gustaría pero no creo que sea buen momento, más bien te agradecería si puedes avisarle a mi prima que ya me voy para la casa.
- Espera, espera, escúchame, sé que recién nos conocemos y todo pero quiero quedarme a tu lado, no sé si me entiendas – en ese instante ella tomo su mano – pero quiero quedarme contigo.
- Aisa, no soy bueno para esto, creo que no es buen momento, no me siento muy bien y lo mejor es que vaya a casa, ahí mi madre me está esperando y creo que le debo si quiera esto.
- Dime ¿Es por el mensaje? ¿Es por ella, verdad?
- Aisa, no es por eso, no me siento bien...– Soltó un suspiro y continuó diciendo – tengo muchos sentimientos encontrados y no quiero hacerte daño, por favor avísale a mi prima, de seguro tú y yo nos volveremos a ver, solo que ahorita no creo que sea correcto.
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Historia de una Semana
NouvellesDecisiones que tanto él como ella tienen que enfrentar para aclarar sus propios sentimientos y ser sinceros entre si. Fotografía: Andrés Villavicencio