Hotel room |Johnlock|

Capítulo III

- Camafeos del Vaticano- Al oír eso Watson supo que era momento de ponerse en posición de batalla, entonces se acomodó detrás de una silla para que no pudiera verse nada de su rubio cabello.

Al mismo tiempo Sherlock tomó como arma un cuchillo y se acomodó firme.

Segundos después entró quien estaba dispuesto a torturarlos.

- Si saben que solo estamos cocinando verduras, ¿no?-mientras que se acomodaba para poder cortar bien esas escurridizas zanahorias, levantó la cabeza.- Rosamund, sal de ahí y cómete eso- suspiró- y también tu Sherlock.

- Comer es aburrido.- bufó mientras caminaba a la mesa y acomodaba su cuchillo para cortar zanahorias también, trozos de muchos tamaños se hicieron presentes en la mesa.

A veces se sentía como tener dos bebes en casa.

Reaccionando John recordó que había algo de lo que tenía que hablar con el castaño - Sherlock, sobre la investigación en el hotel- comenzó con tono sereno.- tengo planes para ese día, aún así no creo que me necesites mucho.

El castaño era consiente de eso, sabía que John aún tenía citas de vez en cuando; las que en realidad lo desvían de lo importante.

Corrió un poco la mirada para comenzar a observar las paredes decoradas con adornos navideños para la próxima semana. El ambiente de departamento viejo se había ido, ahora parecía el hogar de una pequeña familia feliz.

- No.-

- ¿No?- La curiosidad de su voz era palpable.

- John, ¿sabes para que van 2 personas a un hotel?.-Asintió.

Probablemente tu no- Pensó

- Bueno, alguien como el hijo de la primer ministro ¿que necesita?.

- ¿Privacidad?, ¿Una habitación privada?.

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N/a: Baia baia, ¿que estará planeando Sherly? .0.