Allie POV's:
Abrí los ojos lentamente con mis manos en la cabeza, que nunca me había dolido de esa forma tan horrible como en ese momento.
No iba a volver a beber nunca más en mi vida o al menos no ese alcohol barato que sabía tan malo.
No recordaba que había pasado después de eso y cómo había llegado a mi habitación.
Nunca había bebido tanto, es más rara vez bebía, solo lo hacía cuando papá me obligaba. No me gustaba hacerlo y aunque parecía una tontería era por el miedo de llegar a ser él.
En medio de bostezos y frotándome los ojos fui hacia el baño de la habitación.
Esperaba que ese día fuera tranquilo, quería descansar un poco y estar con mi madre, no habíamos casi ni hablado.
Pero su trabajo también le tomaba tiempo y ella no podía sacar tiempo de ningún lugar.
Cuando acabé de asearme arreglé la habitación, aunque me costó más de lo que esperaba con el dolor de cabeza que tenía.
Me miré en el espejo y satisfecha salí de la habitación para irme a la cocina a prepararme un café, sin mi dosis de cafeína no podría sobrevivir a un día entero.
Cuando entré en ella para hacerme el café me encontré a Ryan besándose acaloradamente con la chica que me había dicho que no me acercará a él en la fiesta.
Primero montaba una fiesta y ahora se quería follar a esa tipa en la cocina. Me preguntaba si hacía eso cada día y si mamá sabía de eso, porque si no era que había cambiado radicalmente, sabía que ella se volvería loca si lo supiera.
Me crucé de brazos y los miré entornando los ojos hasta que Ryan se dio cuenta y se separaron al instante.
─Oh, perdón, no sabía que tu prima de 13 años también vivía aquí─ Dijo en un tono de voz burlón. No la conocía mucho pero lo cierto es que estaba empezando a odiar su voz chillona.
Se bajó de la encimera y le plantó un beso en la mejilla a Ryan ─Cuando no esté tu prima nos vemos─ Susurró en su oído y dirigiéndome una mirada de advertencia. Tuve que mantener la calma para no abalanzarme sobre ella.
Cuando se fue seguí a Ryan hacia su habitación, no iba a permitir que hiciera más cosas de esas mientras yo estuviera en esa casa, porque podía aguantar todas sus burlas y lo que me dijera pero vamos, ¿aguantar que se follara a una chica en casa?, eso era otro nivel.
La mayoría de los chicos tenían la habitación desordenada, pero él por alguna extraña razón siempre la tenía ordenada, aunque mi mirada más que en su habitación estaba centrada en los abdominales de su torso cuando se quitó la camiseta.
─¿Qué quieres?─ Dijo quitándose los pantalones. Me di media vuelta antes de que se quitara la ropa interior frente a mí. Era un descarado.
─Yo...Solo quero...quiero decirte que pares de traer a chicas a casa para tener sexo─ Murmuré con la cara hirviendo─. Me incomoda y no quiero pasar todo el verano escuchando a chicas teniendo sexo contigo en tu habitación. Y si no paras tendré que decírselo a mi madre─Dije en un tono serio.
Obligué a mi cuerpo a moverse y salí de la habitación por fin, pero Ryan me detuvo antes de que entrara en la mía.
─No voy a cambiar mi estilo de vida simplemente porque hayas llegado tú─ Dijo tensando la mandíbula─. Si no te gustan las cosas que hago puedes irte de tu vuelta a tu mansión─ Puse los ojos en blanco, me solté y me fui hacia mi habitación.
Era insoportable.
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Vale, sé que el capítulo es corto :( pero mañana vuelvo a subir un capítulo más largo :D si puedo xd,
Marichma
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Solo hermanos ¿verdad? ✔ EN EDICIÓN
Teen FictionSe aman. Se quieren. Se desean. Pero hay un pequeño detalle que los separa, son hermanastros. Ella tiene 17 años, una vida desastrosa y varias inseguridades. Él tiene 19, una vida que cualquier adolescente querría y le sobra el orgullo. Son dos pol...