El quarterback

4

-Yo también espero que haya sido la última vez-admite Lana.

Asiento y me despido de ellos, siempre al acabar de trabajar me vuelvo andando a casa.

Camino tranquilamente, las calles están desiertas y no hay ni un alma, ni un coche y eso que es la calle principal, bueno también son las 3 de la mañana.

Un coche aparece a mi lado y Cody para.

-Naike, sube, te llevo a casa-me ofrece.

-No gracias-niego con la cabeza-iré andando así tomo un poco el aire.

-No te voy a secuestrar ni violar ni nada por el estilo,además, quiero disculparme por lo que ha pasado en el club.

Me siento a regañadientes en su Plorche negro y me abrocho el cinturón.

-La calle...-me interrumpe.

-Se perfectamente donde vives-me sonríe.

-Está bien-me encojo de hombros-espera ¿como lo sabes?

-Naike, llevamos más de 5 años en la misma clase y curso ¿tu que crees?- me parece lógica su respuesta- hablando de Maverick, espero que no le tomes muy en cuenta su carácter.

-¿Estás de broma verdad?-apoyo mi cabeza en el asiento.

-Se que suena chistoso pero está cabreado porque el entrenador le ha dicho que tal vez ponga a otro capitán y eso lo tiene fuera de si-intenta exculparle.

-No tiene derecho a tratarme así por sus problemas, no soy una de sus amigas a las que puede tratar mal-me cruzo de brazos.

-Ya pero entiéndelo, tú no le tratas como todos, y eso le saca de quicio también-para enfrente de mi portal- si le tratas como todas a lo mejor te deja en paz.

-Siento que eso no vaya a ser posible ya que no voy a fingir que no aguanto a alguien y tú lo sabes muy bien-levanto la ceja y salgo del coche.

-Si eso lo se muy bien-me sonríe-¿mañana trabajas?

-Por desgracia seguramente le veré la cara a Maverick-resoplo y uno de mis mechones se quita de mi vista.

-¿A que hora trabajas? Te puedo llevar-se ofrece.

-Cody tienes dueña, no puedes hacer eso-le sonrío divertida.

-No empieces con eso-me río-no tengo dueña.

-Si la tienes aunque no sepas quien es-rueda los ojos.

-Llevas más de un año diciendo eso-acaricia el volante-ya no me lo creo, si esa supuesta dueña no me lo dice pronto me tocará buscarme una nueva.

-Intentaré que pronto te lo diga-me despido con la mano y me subo a mi casa.

Abro la puerta con silencio, escucho la tele encendida, sin hacer ruido me quito los zapatos y paso por el salón para apagar la tele.

La voz de mi primo me sobresalta detrás mía que viene del balcón.

-¿Desde cuando vienes en un coche?-me dice mi primo Max.

-Maldita sea me has asustado-me toco el pecho y recupero el aliento-Cody me ha traido.

-Tu novio, vale ya me quedo más tranquilo.

-No es mi novio, él es cosa de Lana-me quito el top y me quedo en sujetador-además es un playboy y yo no salgo con esos.

-Pero ni tiene lio ni tiene novia-le paro.

-Lios si que tiene, y bastantes-le tiro mi top y el me lo devuelve.

-Lana no es tan amiga tuya y Cody no parece interesado en ella, además ¿crees que ella no saldría con el chico que te gusta si a ella le interesase?-saca el tema que siempre le importa.

-Si me interesase Cody ya lo habría hablado con él hace tiempo sobre esto-me señala.

-Ajá, no has negado que te pueda interesar-contesta victorioso.

-Contigo es imposible hablar-ruedo los ojos-me voy a la cama, mañana tengo que trabajar más.

Me encamino al baño y me ducho, me cambio al pijama, mis primos dicen que todo lo interesante me pasa a mí o en el club, que a ellos no les pasa nada sorprendente, como me gustaría que me cambiasen la vida aunque sea por un rato.

Mi móvil suena en la mesita, un mensaje de Sik aparece en mi pantalla diciendo que mañana empiezo a las seis porque habrá mucha gente y demás.