Beautiful Strange [Dylan Y Cole Sprouse]

Who are you?

Juliet POV:

Todo se repetía en mi cabeza una y otra vez; un destello blanco que me cegó por completo, un dolor agudo en todo mi cuerpo especialmente en mi cabeza, seguido por nada más que silencio y una oscuridad que me mantenía en la quietud.

No sabía si así era como se sentía la muerte pero de lo que sí estaba segura era de que no era como lo relataban todos, como un paraíso lleno de cosas buenas, nada era así, todo era negro, no había nada más que oscuridad y silencio pero había una luz al final, tal vez no era la muerte.

Y temía el hecho de no poder volver a respirar de nuevo, no volver a caminar, no volver a sentir, a no poder vivir.

Juliet, despierta, por favor, todos estamos esperando a que despiertes, vamos....—Escuchaba de lejos una voz que me resultaba familiar y cálida, pero estaba triste.—

Dylan POV:

No puede estar muerta, no, no y no. No creí que por mirar un par de segundos haría que....

No creo que esté muerta, el golpe fue fuerte pero no íbamos a una velocidad alta.

¿Y si de verdad la maté?

Los nervios estaban haciéndome perder el hilo, mis manos sudaban, mi pulso iba a mil por hora, sentía sed y un dolor en la cabeza que parecía empeorar con la espera, caminando de un lado a otro, era imposible quedarme quieto.

La última vez que escuché noticias de ella fue hace 5 horas, cuando la ingresaron y el doctor dijo que necesitaba hacerle exámenes para ver tan grave era. El momento del accidente sentí que el tiempo pasó muy rápido, salí y vi a Juliet en el piso, sin conocimiento, Cole apareció casi al instante, estaba desesperado, la gente no hacía nada, yo estaba helado, aunque quisiera no me podía mover, cuando Cole me miró, vi furia en sus ojos y un cierto desconcierto en él, fue y me empujó, en ese momento reaccioné y yo mismo llamé a la ambulancia, los cuáles llegaron al momento, al igual que una patrulla, se llevaron mi auto y me fui con ellos a la comisaría, una multa y probablemente no tener el carro por un buen rato es lo que me esperaba; de eso se encargaría mi abogado.

A lo lejos divisé a Cole, traía un par de sándwiches, además de unas bananas y té negro al parecer.

Hermano, ¿has sabido algo de Juliet? —Cole me entregó una de cada cosa y se sentó a mi lado, yo le seguí.—

Nada, me dieron su celular, ya avisé a su familia lo qué le sucedió, su hermano está buscando un vuelo, me ofrecí a pagarlo.....—Deje las cosas en un mesón y tomé el celular de Juliet en mis manos, sólo temblaba y las ganas de llorar me pudieron y me derrumbe ahí.— Yo soy el peor....—Mi voz era un hilo mientras me cubría la cara y sollozaba. Sentí los brazos de mi hermano rodeándome la espalda en modo de abrazo, descanso su peso encima y me daba pequeñas palmaditas.

Yo soy tu amigo fiel...—Apenas en un susurro empezó a cantar esa canción que nos encantaba cuando éramos niños.— Yo soy tu amigo fiel, y si algún día te encuentras lejos, muy lejos de tu lindo hogar.

Cierra los ojos y recuerda qué, yo soy tu amigo fiel...—Terminé el trozo de canción que el había empezado, poco a poco me sentía más tranquilo.—

Mi hermano tenía el don de la tranquilidad, y los dos éramos engranajes que funcionaban a la par, si uno dejaba de funcionar o se estancaba, el otro tendría listo algún truco para hacer que ese engranaje siga, era nuestro pacto nunca hablado. Inhale y exhale, profundo mientras sentía que el oxígeno llegaba a mi cerebro, me compuse lento y sequé mis lágrimas, tomé algo de té para bajar un poco los nervios.