Voces de la noche

El teatro de la muerte.

-¿Donde?, ¿donde estoy?.

Era lo primero que se me ocurria preguntar, me dolia la cabeza y me sentia un poco mareado, lo ultimo que recordaba era a ese hombre, se acercaba a mi con esa tetrica sonrisa mientras Samanta lloraba de terror protegiendose tras de mi.

-¿Samanta? ,¿hola? ¿donde estoy?.

Naturalmente no recibe respuesta, ¿abre sido secuestrado? , no, no había razón yo era una persona economocamente baja no habia motivos para un secuestro, entonces ¿donde jodidos estoy?.
Estaba tan perdido en mis pensamientos que me sobresalte cuando unas luces se ensendieron, ahora pofia ver bien el lugar en el que estaba, era... un teatro, con ese clásico escenario de madera en forma semicircular y con aquel telon rojo intenso, ¿que jodidos pasa aqui?  Pensaba, a mis lados y tras de mi había butacas todas vacías, solo estaba yo en ese lugar, entonces las luces se apagaron parcialmente dejamdo ver solamente el escenario, el telon comenzó a alsarse y una multitud comenzo a aplaudir.

-¿Hola? ,¡Alguien ayuda!.- Comence a gritar esperando que alguien me oyera pero en vez de eso solo me respondieron al unisono unos "sssssh" fue entonces que una extraña fuerza me hizo volver a mi butaca, esto ya se estaba poniendo muy raro y escalofriante pero aun faltaba lo peor, el telon se levantó por completo y dobre el escenario aparecieran varios actores, dos para ser mas exactos, aquellos actores comenzaban a discutir y finalmente uno de ellos abofeteo al otro mientras un tercero aparecía en escena, ¿que clase de juego macabro era este? , aquellos actores llevaban sobre sus rostros una extrañas y tetricas máscaras, unas mascaras creadas por piel, piel humana, ecurria sangre de ellas, pero lo mas raro era el parecido de aquellos rostros falsos, era yo, mi esposa y... mi hijo.

-¡Basta!.- Grite y me puse de pié, los actores me observaron y esa extraña fuerza me sento de nuevo tras esto los actores siguieron en lo sullo.

No habia necesidad de ver tal escena, sabia lo que pasaría.
Aque hombre que me representaba siguio golpeando a quien representaba a mi esposa mientras quien representaba a mi hijo lloraba en un rincón, trae un rato el telon bajo y al poco tiempo subio de nuevo, esta vez estaba con esa mujer a quien recurria por placer, mi compañera de trabajó, mi amante, la escena paso a algo un tanto mas ardiente, de algun modo sentía como me miraban con desprecio, mi representación salió de escena y ella llamo por telefono.

-Se a ido no pude sacarle mucha plata, amor ven.

No era nuevo para mi eso, yo sabía que esa mujer me queria solo por dinero, entonces, ¿porque seguia con ella? ,mi esposa me daba todo y yo estúpidamente desahogaba mi pasión con una mujer interesada, ¿que clase de hombre era yo? De nuevo en escena apareció mi esposa, como era costumbre regresaba von flores o dulces o cualquier estupidez buscando su perdon y naturalmente lo hacía, no tanto por los regalos, me perdonaba porque en verdad me amaba, porque yo para ella si era alguien importante, ella me amaba sin esperar nada a cambio pero entonces ¿que paso?.

Al poco tiempo todo seguía igual, discutía con mi esposa, me acostaba con mi amante y pedia perdon a mi esposa, siempre igual asta que la lujuria gano sobre mi razonamiento, me divorcie de ella y me fui von mi amante, eran noches de sexo seguidas por amaneceres solitarios, pues ella siempre se iba temprano a trabajar, no me importaba, el sexo era bueno y eso habia calmado mi pasión por un instante, entonces en escena apareció aquella mujer mi amante, pero yo no reconocía al otro hombre, ella le dio un sobre y se fueron la próxima escena la recuerdo era exactamente lo que ocurrió justo antes de despertar en este teatro de locos, ella y yo habíamos decidido ir justamente a un...teatro, pero antes de entrar nos topamos con ese sujeto, su sonrisa era desquiciante y sus ojos estaban perdidos en la nada, claramente sentia el peligro que de el emanaba.

-¡Denme todo lo de valor ya!.

Grito mientras mi amante, Samanta se ocultaba tras de mi obedeci le di todo, mi billetera, reloj, celular, anillos, todo y justo cuando tenia todo lo mio me apuñaló, recuerdo que lo ultimo que pense era en Samanta en su seguridad en su vulnerabilidad, torpemente le amaba me preocupaba por ella, pero ella reia mientras besaba a ese hombre, ella me habia vendido.
El telon se cerro y al abrirse estaban todos los actores agradeciendo, todos excepto quien me representaba pues seguia tirado en un charco de sangre. La multitud aplaudia, chiflaba y obacionaba tal obra, caian ramos de rosas de todas partes mientras los actores agradecian.

-¡Ya basta!.- Grite mientras me levantaba y corria al escenario derribando a aquel sujeto que la hacía de mi asesinó, tras caer al suelo comence a golpearlo una y otra vez.

-¿¡que quieren de mi!? ,¿¡ donde estoy!?.

Los demas actores me rodearon pero no me importaba deficitaria mi odio con el finalmente le quite aquella tetrica mascara y al ver su rostro quise correr, pero aquel actor que la hacia de mi me apretaba de el pié, todos se quitaron sus máscaras dejando ver un rostro descompuesto, con carne podrida y gusanos deborando lo poco de piel que tenían.

-¡Socorro!,¡No, ayuda!.
-¿Ayuda? Aqui nadie te ayudara.

Me dijo una voz grave y sombría.
-Estas en mi teatro, ¿No te gusta mi obra? , confieso que eres mi inspiración.
-¿Quien eres? ¿que quieres?.
-Soy el fin de tu vida, soy el dueño de tu espiritu, soy el amo de los muertos, soy... la muerte. En cuanto a que quiero, bueno quiero hacerte sufrir un rato antes de que mueras al cien, quiero que veas como por tus estupideces terminaste aqui, quiero ver como tu desesperación te consume, pero mas que nada quiero ver una nueva obra y el siguiente eres tu, si tu lector, no sonrias no es broma, esperare por ver tu triste y patetica vida en mi teatro, por favor no me desepciones.