Capítulo 4 🍸

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Una vez terminaron de almorzar se dirigieron a sus trabajos, el deber llamaba. Se la habían pasado platicando , riendo , contando anécdotas muy graciosas; notaron la química que tenían al instante, de esas que notas cuando haces una verdadera amistad o un verdadero amor y Jimin lo había descubierto ese mismo día.

Una vez  que cada uno estaba en su respectivo sitio de trabajo siguieron su jornada. Jimin seguía entregando papeles y más papeles que firmar o anunciar, reuniones que tuviera su jefe, Yoongi, el gran empresario que lo tenía moviéndose a cada momento. Ya sea para una taza de café  hasta para avisarle cosas que para Jimin eran innecesarias.

Se sentó en su pequeña silla movible y navegó  un rato en su celular, sin darse cuenta cuando alguien entro.
-Cariño, si quieres conservar el trabajo será mejor que no hagas enojar al jefe , si te descubre así -  dijo Suran, la del staff.
-oh!, si lo lamento Suran nona- respondió Jimin al instante guardando su celular.
- Bueno lo que te quería decir , es que no permitas que nadie entre a la oficina del señor Yoongi hasta que yo te avise ¿si?- dijo la fémina arreglando se el vestido que llevaba puesto.
-Sí  , claro nona.- respondió Jimin no queriendo preguntar más por temor a que se metiera en terreno que no le pertenecía estar.
-Bien, te veo luego cariño- dijo por última vez , antes de salir por la puerta negra del castaño. No quizá malpensar, pero tenia una pequeña idea de que el jefe y Suran  se traían algo.  Restando le importancia a sus pensamientos siguió con su trabajo.
Paso casi una hora en que Jimin no hizo casi nada. Sólo unos cuantos inversionistas habían llamado para cerrar tratos con el señor Yoongi.

Ya eran cerca de las siete de la noche y Jimin decidió salir a tomar algo a la cafetería de la empresa. Pasó  por la oficina del jefe y escucho ruidos extraños, la curiosidad venció a Jimin y a pasos lentos y sigilosos se asomo por la pequeña cortina de la ventana y vio lo que sospechaba. A pesar de que alcanza a ver poco , pudo notar a Yoongi y a Suran dándose un fogoso beso.
Se lo imaginaba, era tipo esas novelas que leía,  donde la secretaria se metía con el jefe aunque en este caso fuera Jimin el secretario y no Suran. Decidió salir de ahí lo antes posible, ya había visto suficiente.

A pasos apresurados bajó a la cafetería,  encontrándose con la misma chica que lo atendió el día de ayer. Se le hacía muy adorable aquella bella sonrisa en el rostro de la fémina.  Leyó  el nombre en la pequeña placa de metal:
JISOO
"Bonito nombre"- pensó

-Buenas noches, ¿que desea que le sirva?- preguntó
-Buenas noches, ummm... dame una malteada y un pan keke por favor- respondió devolviendole la sonrisa a la bella joven. Ésta anotó  todo el pedido y le dijo que esperara unos minutos por su pedido.

Jimin se alejó y se sentó unos minutos en una de las sillas de espera al costado de la vitrina dónde minutos antes había conversado con la joven.
Sintió  que se sentaron a su lado, pero no prestó  atención y siguió metido en su celular.
-Esperas hace mucho pequeño- escucho a su costado , haciéndole girar la cabeza rápidamente.  A su costado se encontraba aquel joven que se encontró el primer día que vino  a trabajar. Junkook creí que se llamaba, no recordaba bien.
-oh, Hola señor buenas noches. En realidad no , hace unos minutos acabo de pedir- repondio con una simple sonrisa .
-Que bueno, yo igual. Así tenemos más tiempo para platicar- dijo el otro joven.
Jimin estaba nervioso, no quería decir alguna tontería a alguien tan importante como el joven que se encontraba frente suyo.
-S-sí claro.- respondió con un leve rubor en sus mejillas.
-Para empezar ¿que edad tienes pequeño?- repondio dándole una mirada de arriba a bajo con descaro. Jimin se sentía muy incómodo pero trato de calmarse, cualquier día sus nervios lo terminarían matando.
- tengo 18 casi 19- respondió.
-waou, eres realmente joven, ya veo por qué Yoongi te escogió - dijo lo último en un tono bajo pero que alcanzó a ser escuchado por el menor , que se quedó  con la intriga del saber por qué alguien como Yoongi lo aceptaría a él  entre tantos jóvenes con títulos.
-¿Por que lo dice?- dijo Jimin alzando una ceja.
- por nada pequeño , ya lo sabrás. Respondió con una sonrisa ladina,  asiendo una señal con su mano de que le restará importancia. Jimin prefirió restarle importancia.
-Ya que tu no preguntarás , yo tengo 21, pero no te molestes en llamarme hyung , dejemos las formalidades a un lado ¿no crees?- dijo sonriendo, mostrando le al castaño una sonrisa de conejo, muy hermosa por cierto.
-Está bien- respondió Jimin con una sonrisa.

Jimin, Jimin.

Escuchó que lo llamaban y se despidió del joven, acercándose hacia su pedido.
Regreso a su oficina con su taza de café en mano y su keke en la otra. No podía girará la cerradura.

"No puede ser cierto "- se lamento para sus adentros, buscando la manera de entrar , pero sin logrará ninguna salida ya que nadie se encontraba por ahí.  En el último piso solo se encontraba la oficina del señor Yoongi , la de él  y la de Suran que se encontraba al fondo  de todo el pasillo.

-Déjame , te ayudo- dijo esa reconocida voz gruesa, que le hizo sentir escalofríos con solo escucharla. Alzó  la vista encontrándose nada mas y nada menos que con Yoongi. Sintió sus manos sudarle y su corazón latir más rápido.  Su jefe lo había chapado con las manos en la masa. No era su hora de descanso  ni nada por el estilo.
-G-gracias señor - respondió Jimin son fuertemente rubor en sus mejillas. Maldición que situación para más bochornosa.
Entró y dejo el café y el keke en su mesa.
-L-lamento que me haya encontrado en esta situación,  no volverá a pasar- dijo haciendo reverencia, sin darse cuenta que la otra persona que se encontraba justo al frente de él  estaba con una sonrisa ladina.
-No te preocupes , a cualquiera le pasa. Además no tenias trabajo .- respondió sentándose en la silla de al frente  de Jimin.
- ¿Que se le ofrece señor?- dijo Jimin de inmediato .
-Primero, deja de llamarme señor tengo apenas 23 años solo dime Yoongi  o jefe como quieras.- dijo restando le importancia.- Segundo, quiero que mañana programe una cita con el señor Wang a las 4 pm , aquí . Y por último,  quiero avisarte que a partir de mañana te quedaras hasta las nueve. Solo será  por un mes . Ya sabes , para ver como vas con todo esto- dijo sonriendo y parándose al instante, se acercó rápidamente a la puerta abriendola- Te veo mañana Jimin- dijo cerrando la sin dejarme contestar siquiera.

Mañana seria un largo día para
Jimin.

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Hola mis lectoras bellas, acá otro capítulo.  Mañana actualizaré doble lo juro. Espero les guste y sigan dando estrellas . Las amo besos ❤🙋😘😘🍸

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