Cambios

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Después de mucho tiempo al fin les traigo la actualización. Me enrede en una parte la cual retraso que terminara este capitulo. Bueno ya no los molesto con mas excusas

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Dejando salir un pequeño bostezo de cansancio, la joven pelinaranja siguió firme en su camino. Los amplios pasillos que dentro de unos minutos se llenaría con la multitud de estudiantes que buscaran aprovechar su hora de almuerzo, realmente sería un problema si no se apresuraba a llegar a su salón antes de que eso ocurriera.

Últimamente se estaba sintiendo muy cansada a tal extremo de estar a punto de quedarse dormida en horas de clase en varias ocasiones, este inusual cansancio lo recompensaba comiendo de a montón durante el almuerzo, la misma Liz se sorprendía de su gran apetito y lo mucho que se encontraba distraída en los últimas semanas.

Antes de llegar a la esquina en la cual giraría para llegar a los salones no pudo evitar sonrojarse al observar el pequeño letrero en una habitación contraria a la dirección que tomaría, el solo recordar la razón de porque su reacción le hacía sonreír y al mismo tiempo avergonzarse...

Para ser más exactos su novio y ella habían hecho actos indecentes en dicho lugar, haber dado rienda suelta a su amor en la escuela era algo tan irresponsable por parte de ambos. Sí, muchas veces había recapacitado su actuar pero el hecho de encontrarse solos, recibiendo sus mimos y disfrutar que la besara de ese magnífico modo le hacía perderse, detenerse era lo último que pasaba por su mente.

Desde el día en que aclararon sus malentendidos, Kazuto se había vuelto más cariñoso y pendiente de ella, su relación cada día se fortalecía, a pesar que habían surgido varios problemas, problemas que ella temía lidiar era su Madre

Al día siguiente de su reconciliación Kazuto se presentó ante su progenitora, quien junto a su padre y hermano estaban muy preocupados por no saber nada de ella en más de 24 horas. La reacción de su madre no se hizo esperar, lo tacho de vulgar e inadecuado para su hija, criticándole que solo un irresponsable y maleducado como él actuaria de esa forma, tan impropia con una señorita de clase.

A pesar que Kazuto insistió en que él era el indicado para ella, su madre no desistió a su rechazo. Su padre un hombre bondadoso y cariñoso no logro apoyar demasiado al azabache, al conocer el carácter de su esposa llevarle la contraria solo complicaría más el asunto y dejaría sin posibilidades a la joven pareja.

Claro existió una reprimenda por parte de sus progenitores, durante dos meses su tiempo estaría limitado a solo asistir a clases y regresaría a casa de inmediato. Del punto de vista de sus actuar el castigo era justo pero al mismo tiempo injusto ya que únicamente podrían verse en la escuela.

A pesar de haber aceptado el castigo su madre intento aprovecharse de la ocasión y se propuso cambiarla de Instituto a uno más idóneo según ella. Algo que ambos jóvenes no aprobaron y se negaron rotundamente, fue una dura batalla que ganaron con el apoyo de su padre y hermano mayor quien no vieron de buen modo la forma en que Kyouko quería terminar con las esperanzas de ambos.

No obstante ellos no se darían por vencidos tan fácilmente, pues Kazuto había burlado no en una sino en varias ocasiones la exagerada vigilancia que Kyouko coloco sobre ella. Esa misma noche que el castigo le fue dado a la pelinaranja su novio se coló en su habitación para continuar con las muestras de amor desenfrenado en la que estaban inmersos.

He's my fatherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora