~♡ Señora Choi

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Especial- Extra largo

Narra Elizabeth:

Recuerda siempre: "Que yo vivo, existo y que el día que menos lo esperes, apareceré y será algo grandioso"-




Desperté sobresaltada con mi respiración agitada y mi corazón enloquecido. Aún podía escuchar en mi mente su risa malévola y el sonido de su voz.

Ahí estaba otra vez ese sueño que me atormentaba cada noche. Tan sólo había sido una pesadilla, pero aún así tenía mucho miedo.

¿Y si viene a arruinar mi boda?

Y si entra en el momento justo del ¿Yo me opongo?

Sacudí mi cabeza para sacar esos malos presentimientos. Hoy no podía estar preocupada por esas cosas, hoy era el gran día.

Estaba sola en la casa de Minho, él se encontraba en la casa de sus padres preparándose.
Me levanté y contemplé el hermoso día que estaba tras la ventana. Los rayos del sol iluminaban de manera fascinante.

Me duché y tomé un buen desayuno mientras esperaba a la gente llegar. Estaba nerviosa, mi corazón palpitaba de manera loca en mi pecho, no puede dormir bien de la pura ansiedad. El sonido del timbre me sacó de mis pensamientos, abrí el portón eléctrico e ingresaron dos vans hasta el antejardín. Abrí la puerta emocionada toda mi familia estaba aquí conmigo hoy.

Mi madre, mis tíos, mis abuelos, mis primos, incluso Amanda que había pedido vacaciones en su trabajo para pasar estos días aquí. Cuándo llegaron todos los recibí con los brazos abiertos, el calor de hogar que me trasmitían era cobijador.

Maquillaje y peluquería llegó a los pocos minutos. Tenía cinco horas para arreglarme y sentía que con un solo respiro se me iba la vida entera. Creo que el día de hoy el reloj no era mi amigo, porque lo miraba cada cinco minutos y era como una hora para mí.

-¡Deja de mirar el reloj que me va a dar algo!-Me dice Amanda que estaba mi lado.

-Lo siento... no puedo evitarlo ¡ME MUERO DE LOS NERVIOS!-Le digo gritándole.

-Tome mija, una agua de melisa- Me dice mi abuela ofreciendo una taza de té.

-Gracias, espero que me logre calmar un poco- Le respondí sonriendo y probando la deliciosa infusión.

Me senté y dejé la taza sobre la mesa, para que la maquilladora comenzara con su trabajo. Mi maquillaje consistía en algo simple, ya que el vestido iba a ser el centro de atención. Sólo destaqué mis grandes ojos cafés y un color rosado sutil sobre mis labios. El peinado era un recogido, para destacar el hermoso escote.

...

Ya eran las siete de la tarde, las horas pasaron rápido, mi familia ya se iba a la iglesia. Todos se despidieron, mi madre tenía una mirada de orgullo y emoción a la vez, besó mi frente y me abrazó de manera fuerte. La vi alejarse impregnando la habitación con su delicado perfume. Suspiré buscando un poco de tranquilidad, necesitaba unos minutos a solas, para calmar mis emociones.  

  

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Todo fue cosa del destino ~♡(Choi Minho)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora