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*¿Quién te da el derecho de amar? ¿Por que te lo da cuando no lo esperas, y te lo quita cuando lo necesitas? , el amor es hermoso, pero también es un castigo, lo disfrutamos y a la vez lo sufrimos, queremos que la persona que más amamos sea feliz toda su vida, pero cuando eres tú quien causa algo malo en el, todo tu mundo se derrumba. El amor te golpea en la cara , en el pecho, en todo el cuerpo, no puedes salvarte, el amor te seguirá a donde quiera que vayas, ¿dolerá? Si, pero lo disfrutarás*

Hidan...

Solo dímelo! Me amas!? Alguna vez me amaste!? Kakuzu no puedo dejar que me toques si no me lo dices! Quítate! -hidan tenía miedo, mucho miedo, de que lo golpeara, o que Kakuzu perdiera el control ...pero, nada de eso pasó, al contrario, el moreno le había tomado del rostro y lo besó de forma tierna; hidan, él que era siempre Tan desobediente, peleador, grosero..pero ante los labios del moreno ¿quien podría resistirse? , Kakuzu comenzó a besarlo de forma tan profundo que hidan tuvo que inclinar el rostro para que esa lengua entrara, por más que le empujaba, el moreno le apegaba más a su cuerpo, sus grandes manos Se paseaban por esa cintura delineando lentamente- ahhh..basta respóndeme! M-maldita sea...te odio

Es tu culpa... cuanto tiempo te fuiste? Me tienes en abstinencia ...-se quedó callado al ver la cara de hidan, diablos otra vez lo hizo, hidan otra vez estaba pensando que solo lo quería por sexo, sexo y ya- deja de verme así!! - a causa de ese grito hidan se tapó la cara con ambos brazos ...- tsk..no voy a golpearte..solo relájate ... -Kakuzu pedía demasiado , hidan solo conocía la violencia viniendo de Kakuzu, y ahora que él quería ser dulce, no entendía nada, lo veía con odio, con terror pero esas caricias que el moreno le daba, cambiarían todo, y como lo dijo , no lo golpeó, acarició lentamente esos muslos con las manos quitándole dicho pantalón, no lo arrancó, sorpresivamente solo se lo fue quitando poco a poco hasta ver aquellas piernas tan blancas con ciertos moretones - estos..los hice yo? -pregunto el moreno mirando aquellos ojos lilas-

Con todo lo qué pasó ya ..ya no sé qué golpes son los tuyos y cuáles son los que me hice en esa caída por estupido...y ..que? Te importa acaso? Que fue lo qué pasó para que yo te importara!?, que más te da!? Si yo me muero, tu estarías feliz, lo único que perderías sería una puta! Tu lo dijiste! Podrías conseguirte una en cualquier momento! Yo no soy especial! Solo te sirvo para tu propio placer ...ahora vienes y te preocupo!? No me hagas reír eres un bastando! -esas palabras se encarnaron en uno de sus corazones de Kakuzu, y le causó dolor, las recordaba...tomó aquel cuerpo y de nuevo le calló con un beso pasional, Kakuzu no lloraba, y no lo haría por más que le doliera, pero ese beso era como si lo hiciera, hizo que hidan abriera esos labios para darle un beso profundo y necesitado, acariciando esa mejilla y apretarla Para que hidan no se alejara de él, le besó un buen rato hasta que bajo su propia mano hacia esa entrepierna acariciandola lentamente, queriendo estimularle lo más que podía y en cuanto apretaba la boca de hidan se abría dejando salir gloriosos gemidos- i-diota que estás haciendo? Por qué? No quieras engañarme! A-ahhhh...-por que mentir? Se sentía bastante bien, después de todo su miembro parecía exacto al tamaño de la mano de Kakuzu, así que no podía dejar de gemir por el-

** Sabes que te deseo
No es un secreto que trato de ocultar
Yo sé que me quieres
Así que no sigas diciendo que nuestras manos están atadas**

No tengas miedo, aquí nadie puede escucharnos, y aún que lo fuera , no me importa,Hidan..solo déjate llevar ..-la voz profunda y sensual de Kakuzu recorría el cuerpo del albino, y este reaccionaba como nunca, masturbándole de forma ya un poco más fuerte, a pesar de que quería ser dulce con el albino, sabía de ante mano cómo reaccionaba ese cuerpo, sabía que tenía que ser pasional y un tanto rudo para que se derritiera en sus manos-

Entre El Amor Y El OdioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora