Un infinito entre nosotros

Capitulo 4

La familia de Adam era muy linda, siempre haciendo fiestas o cenas por cualquier cosita.
Me gustaba pasar tiempo con ella siempre habia un tema del cual conversar.
Salimos de la casa de su mamá.
Sus papas no vivian juntos por motivos que Adam aun no sabe.

Llegamos al coche y Adam abrio la puerta.

-¿Quieres que te lleve a tu casa?-

-¿Porqur no habrias de hacerlo?-

-¿Llevas prisa?-

-No-

-Bien, sube te llevare a otro lado-
Dijo abriendo paso para que entrara.

Eran las 12:40 y salimos de alli.

Cuando llegamos Adam abrio la puerta y pude sentir un aire fuerte y frio.
Estabamos en la playa, la luna le brindaba un resplandor hermoso al mar.
Cubri mis brazos con mis manos al salir habia un poco de fresco.

-¿Frío?-
Dijo abrazandome por la espalda. El calor de Adam me hipnotizaba.

-Es hermoso- dije mirando al horizonte.

-No mas que tu-

-Eres un cursi-
Dije volteando a verlo.

-Tu me haces ser cursi-
Dijo dandome un pequeño beso.

-Siento algo de frío-

-¿Quieres entrar?-

-Si-

Entramos al coche. Adam tomo mi mano y me miro fijamente siempre teniamos ese pequeño momento donde el mundo se paralizaba y solo existiamos los dos.

-Sara-

-Adam-

-No quiero que esto se acabe-
Dijo tocando mi mejilla

-Nadie esta diciendo ni asumiendo que haci sera-

-Te amo Sara y las cosas que tu me haces sentir son tan gigantes-

Me quede en silencio él siempre se expresaba asi. Pero cada vez que lo hacia sentía que era la primera vez.
Sonrei y pude sentir mis mejillas sonrrojadas.
Era algo inevitable si no hubiese sido por la poco luz que teniamos me miraria burlón.

Mire hacia abajo, él levanto mi menton y me beso.
Sus manos se fueron directamente a mis piernas y desde la rodilla subia de ella hasta mi pierna lentamente.
Subí mis manos a su cuello y el intento hacercarse mas y al intentar hacerlo toco el clauson del coche.
Nos separamos y reimos.

-Lo siento-

-Esta bien-

-¿Vamos?-

Asentí, y dio marcha al coche.

Me dejo en casa y no se fue hasta que habia entrado completamente en ella.
Mis padres ya estarian dormidos asi que silenciosamente subí a mi habitación.
Me duche, me puse una pijama rosada mama decia que parecia una niñita siempre que lo usaba y me acoste a dormir.

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Desperté por el sol de mi ventana y tube que levantarme a cerrar la cortina de ella.
Era sabado estaba algo asueñada por lo de anoche me reacomode y seguí durmiendo.

No paso demasiado tiempo y me levante no porque quisiera pero mi estomago me hablaba.

Vi mi telefono y eran las 11:30am fuí al baño, cepille mis dientes y baje a comer.

Papá estaba en la sala viendo el computador y mamá estaba haciendo lo que suponia que debia ser la comida.
Entre a la cocina y un olor esquicito invadio mis fosas nasales tanto que abrio mas mi apetito.

-Huele riquisimo-

-Deberias de comer algo-

-Lo are-

Abri el refrigerador  saque un poco de leche y calente un pan en el microondas.

-Creí que te ibas a quedar en la cama todo el día-
Mi papá estaba apoyado en la puerta de la cocina mientras yo me sentaba en la mesa.

-Si, queria estarlo pero mi estomago me pedía comida a gritos-
Todos reímos.

-¿A donde fue anoche señorita?-
Se sento frente mio.

-Adam me invito a una cena con su mamá su hermana se va a casar y quisieron celebrarlo-

-Que bien- dijo mamá mirandonos.

-Creo que debiste de avisar niña-

-Lo siento siempre lo hago, ya no lo are lo prometo- le di una mordida a mi pan.

-Bueno siendo asi. Que les parece si salimos a distraernos un rato, no tengo que hacer y no siempre es así-

-Seria genial- tome un poco de leche.

-Vamos, pero despues ire por unos papeles que necesito para los examenes de la universidad- dijo mamá lavandose las manos.

-Si, pero hay que comer primero-
Dije casi con la boca llena.

-Claro pequeña- dijo papá tomando mi menton miestras hacia un puchero.
Siempre decia que era a quien más amaba aparte de mama que era unica y especial.

Despues de ver un rato televisión la comida estaba lista.

Mamá sirvio y mientras comiamos, hablabamos del trabajo de papá, de mis clases y de las de mamá.
Ayude a lavar los platos y subi a ducharme era uno de los días en que necesitaba el agua como el aire. Asi que demore un poco.
Me puse unos jeans cafe oscuro y una blusa beis. Me amarre el cabello en una coleta use unos converse y cuando estaba amarrando las agujetas alguien toco la puerta.

-Ya casi-

-Si mamá bajo en un minuto-

-No tardes, te esperaremos en el coche-

Escuche que bajaba las escaleras. Me perfume y baje casi corriendo cuando cerre la puerta principal escuche una moto aproximarse.
Adam bajo de la moto.

-Buenas tardes- saludo a mis papás.

-Hola- dijo me abrazo y beso mi frente -Perdon por interrumpir ¿Iban de salida?-

-Si, pero nada importante si gustas puedes venir con nosotros- dijo mamá

El asintío y subimos al coche.

Papá nos llevo a un parque, el sol estaba por irse ya y el día era perfecto.

Mis papás caminaban juntos, mamá tomaba el brazo de papá. Hablaban, reian, señalaban.
Nosotros ibamos detras y los imitabamos.

-Perdon por llegar sin avisarte pero queria verte-

-Esta bien tuviste suerte de encontrarnos-

-Si-
Adam miro al frente para despues mirarme a mi.
-Se ven muy lindos juntos me gusta la forma en la que tus papás se distraen-

-A mi me gustas tu-
Se giro y me beso ambos sonreimos y junto nuestras frentes.

Nos detuvimos a comprar dulces típicos y nos sentamos a comerlos.
Adam me miro y tomo un dulce justo cuando iba a darmelo en la boca él se la comio.

-Que malo-

-Lo siento lo saboreaste mucho y no quiero que me seas infiel- dijo masticandolo.

-No te engañaria con un dulce Adam-

-Mas vale prevenir-

-Nos vamos si gustan pasar un rato mas aca pueden hacerlo- dijo papá levantandose.

-Gracias señor- dijo Adam.

-Antes de las 11-
Lo miro advertido.

-Si señor-

Se fueron y nos dejaron sentados discutiendo la infidelidad de un dulce.