Give me love [Tododeku]

Capítulo 1

Izuku era uno de esos chicos que en cuanto tocaban la almohada se quedaba más dormido que una piedra.
Estaba cansado del día tan agitado y aunque le hubieran pasado cosas locas, él solo quería descansar, pero la picazón comenzó a impedirlo.

Mientras se preparaba para dormir, rascaba la parte alta de su espalda y al principio no le dió importancia pero después de unos minutos la sensación se intensificó demasiado, asustado, se quitó la camisa y trató de rascarse más fuerte, no le importaba el estado de su piel solo quería terminar con esa pesadilla, ya era tarde y no había podido dormir absolutamente nada.

Llevó una vez más su manos a su espalda y rascó frenéticamente hasta que tuvo una sensación fría en la piel y un líquido espeso y tibio, resbaló por la misma.

Genial- pensó- Ni siquiera tengo uñas largas para poder sacarme sangre y es justo lo que me pasa.

Se dirigió al baño y se dió la vuelta frente al espejo tratando de observar por encima de su hombro.

Se llevó una verdadera sorpresa y casi suelta un chillido (nada) masculino al darse cuenta que no solo estaba sangrando, sino que tenía cortadas verticales demasiado grandes y profundas en la espalda ¿Él había hecho eso? De inmediato entró en pánico y trató de limpiarse con una toalla húmeda, estaba tan asustado que comenzó a sollozar, le costaba trabajo respirar con normalidad y sentía que se estaba agitando cada vez más ¿Qué le diría a su madre? ¿Cómo curarían esas heridas? ¿Cómo había pasado eso? Más bien ¿Qué estaba pasando? Las preguntas en su cabeza solo lo atormentaron más y no dejó de pensar en ellas hasta que se topó con algo inusual en la toalla con la que intentaba limpiar la sangre, era una pluma, una pluma que podría haber sido completamente blanca de no estar manchada por sangre.
¿Eso había salido de su espalda? No recordaba tener mascotas aves aunque a estas alturas todo podía suceder.

Acarició con cuidado la parte afectada de su piel, la sangre seguía ahí pero en efecto sintió algo suave, en el espejo podía ver pequeñas plumas brotando de las heridas, al parecer no dolía que salieran las plumas pero si dolían las heridas ya abiertas y expuestas. Al darse cuenta de que no podía detenerlas solo se sentó en el suelo del baño, justo debajo de la regadera con cuidado de no recargar su espalda a la pared y esperó.

La sensación era extraña, el movimiento involuntario en su espalda realmente lo asustaba pero concluyó que llorar no traería ninguna solución al problema y podría despertar a su madre quien probablemente ya estaba dormida.
Ms. Joke dijo que ella le daría respuestas en cuanto se presentaran los "síntomas". Izuku no sabía a qué se refería pero intuía que se trataba de algo como eso. Después de todo, no cualquier día te convertías en una hermosa.... Paloma o gallina en su caso, porque tenía demasiado miedo.

¿Que pensará su mamá cuando lo viera? Era increíble que todo esto le estuviera pasando, jamás habría aceptado de saber que tendría que herir su propia espalda para terminar con un montón de plumas sobre ella, debía aprender a leer todo el contrato y las letras pequeñas antes de firmar.

El movimiento en su espalda se detuvo, no se dió cuenta hasta que sintió un peso extra en su cuerpo, sin duda había algo que se apoyaba en su espalda.
Se giró solo unos centímetros para ver y palideció al instante, con tantas sorpresas podría haberle dado un ataque al corazón.

-¡Por los calzones de All Might!- dijo sin poder evitar levantar un poco la voz.

Con los ojos muy abiertos reconoció lo que debían ser alas, enormes alas que se conectaban directamente a su espalda, las plumas eran casi bancas pero la sangre seguía ensuciando su pureza. Se arqueaban en torno a su cuerpo y se movían con el vaivén de su espalda al respirar.