Darcy ||L.S||

Capítulo 14

Harry llevaba tomando supresores desde aquella vez que se desmayó porque le bajó el celo. Los tomaba cada vez que se acercaba su celo, así era una forma de "anularlo" de alguna manera.

Ya llevaba un mes en el Cairo, seguían la pista de Darcy, sabían que aún estaba suelta, pero se movía demasiado, siempre que encontraban un sitio donde sabían que estuvo, ella ya se fue a otro.

Harry podía hablar con normalidad, aunque no podía entablar una conversación normal sin echarse a llorar a los 10 minutos.

Lo cual, en sus negocios, fue más un pro que un contra, porque ponía para un mismo día diez reuniones y en una hora ya las había zanjado, hacía sus negocios mil veces más eficientes.

Louis y él se hablaban con cariño, ya no discutían, Louis tenía miedo de herirlo si le gritaba.

Harry empezaba a hartarse de ser un animal herido a la vista de todos. Quería dejar de ver pena en los ojos de todos, sobre todo en los de Louis. Quería ver lo que vio hace años, quería ver amor, no pena.

Sí, Harry se volvió a enamorar de Louis, y temía salir herido, pero que le den a todo, él NECESITABA enamorarse de Louis de nuevo.

Una vez acabada la última reunión del día, se fue a la habitación de Louis con un bote de cinco litros de pintura rosa. Agarró uno a uno los trajes de Louis y los metió en la pintura, luego los dejó colgando en el armario para que secaran. Se puso pintura por la cara de manera disimulada para que se viera que fue él.

Apartó un poco el pote para cerrar el armario y sin querer lo derramó haciendo que la pintura rosa tiñera todo el suelo y sus zapatos.

Oops.

Oyó la puerta abrirse, mierda.

Bueno, en realidad bien.

"¿Harry?"

"Hey" sonrió.

"¿Qué hace ese pote de pintura derramado y por qué estás cerrando mi...?" Louis se puso serio de golpe y abrió el armario. Le empezó a dar un tic en el ojo.

"Yo..."

"Entiendo que el estrés post traumático te haga hacer... Cosas raras, pero por favor, no metas mis trajes en pintura rosa y luego los cuelgues."

"LA PUTA MADRE, LOUIS." Harry explotó gritando y Louis se asustó al ver esa reacción "¿QUIERES ENFADARTE CONMIGO? ¡ACABO DE METER MEDIO MILLÓN DE LIBRAS EN PINTURA ROSA Y TÚ ME PIDES CON EDUCACIÓN QUE NO LO VUELVA A HACER!"

"Harry, cálmate, no sé por qué quieres que te hiera..."

"No es que quiera que me hieras, quiero que dejes de mirarme con pena como si fuera un animalito con una jodida pata rota."

"Yo... Lo siento, Harry, no quiero que pienses que me das pena, solo que me da miedo herirte... Últimamente estás raro, no paras de intentar llamar la atención y a veces pienso que es porque no te cuido lo suficiente..."

"Llamo la atención para que me grites, para que me digas que tengo 24 años, no 5, que madure... Quiero que pares de mirarme así, me doy asco cada vez que lo haces, porque en tu mirada solo veo un pobre hombre, le han violado y es como si me recordaras una y otra vez eso. Ya lo he superado, Louis, ya puedo hablar durante diez minutos con alguien, ya no tengo pesadillas, estoy bien, estoy mejorando."

"Te prometo que a la próxima te gritaré" sonrió Louis, guiñándole un ojo a Harry.

"Gracias" sonrió Harry.

La puerta sonó.

"Adelante" dijo Louis, la puerta se abrió mostrando a Liam.

"Tenemos una pista. Darcy se está dirigiendo hacia Alejandría, unos detectives de la mafia han investigado y unos paisanos les han dicho que vieron a una niña en una camioneta de remolques, seguramente el conductor no sabía que la niña estaba ahí."