Era una noche tranquila y calurosa de verano, el viento murmuraba muy despacio a través de las hojas de los árboles del jardín, me recosté sobre la cama, apuntando XXII- sobre mi libreta de sueños, que usaba como forma de acercarme a mi mundo de fantasía, un mundo que vivía dentro de mí, en mi mente.
Apagué la luz, me tapé con las sabanas pese al calor, era una persona insegura después de todo, no podía dormir destapado por el miedo a ser rozado por los demonios de la noche. Las sábanas estaban limpias; la cama, cómoda y la almohada estaba fría, aunque con el tiempo que hacía eso no duraría mucho. Cerré los ojos, empecé a pensar en cosas triviales, sin importancia, noté como empezaba a perder el control sobre mi cuerpo, estaba listo para viajar a mi mundo, y eso hice, sin darme cuenta ya estaba en él, siempre lo he estado; la diferencia entre soñar despierto y soñar dormido es que en la primera te distraen y te manipulan, pero cuando duermes todo es lo que quieres que sea, o eso pensaba.
Perdí el conocimiento por completo de la realidad y por fin llegué a mi mundo, desperté.
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La ciencia de la mente
Cerita PendekHoy les contaré la primera historia basada en mis sueños, los suelo apuntar y algunos dan que pensar, en esta historia os mostraré la facilidad con la que un principio científico puede der capaz de volverse loco en el mundo de los sueños y ser partí...
