Salva, Reza y Vive / Yuri!!! On Ice.

Capítulo 3 "Extraño"

Se dieron el abrazo más tierno que en la vida Yuri nunca obtuvo de parte de su amigo, sentía que había fracasado, pero sobre qué?

- Yurio yo realmente estoy feliz que hayas encontrado a la persona que amas... ugh - sintió un dolor punzante en el pecho, el dolor fue tan fuerte y repentino que empezó a frotar por enzima de sus ropas sin obtener alivio alguno, porqué ahora? El estaba dispuesto en apoyarlo en lo que desea porque era su amigo, solo amigos - perdona Yurio al parecer ahora mismo... no estoy feliz - Yuri hablaba solo.

- Yuri ! Ven aquí - gritó Yurio lo suficiente para sacar al cerdito de sus pensamientos - se acercó tranquilamente y con una leve sonrisa saludo al ya amante de Yurio.

- Hola es un placer conocerte mi nombre es Yuri Katsu... - Recordó que escaparon secretamente del palacio e intento crear otro apellido, pero no lo logró - katsu...don si ese es mi nombre - todo avergonzado no dejaba de inclinarse una y otra vez.

- Pffff jajaja despues de todo este tiempo al fin lo admites jajaja - Yurio se burlaba haciendo que la reverencia de Yuri sea más exagerada para ocultar su rostro enrojecido de la vergüenza - jaja, pero enserio cerdo - limpiando sus lagrimas intentando ponerse serio - el sabe perfectamente de quién eres y no hay de que preocuparse - agarra el hombro de su compañero para que este pueda preentarse.

- Un honor conocerlo principe Yuri mi nombre es Otabeck Altin primogénito de los comerciantes Altin quienes se encargan de organizar sus eventos y exportar sus productos - Otabeck expresaba su mayor respeto con toda la seriedad.

Yuri no hizo más que regresar el saludo agachandose sin apartar la mirada de él - un gusto conerlo - el realmente lo conocía, pero nunca fue capaz de hablar con el se veía serio y maduro incluso desde adolescentes cuando se presentó por primera vez para organizar la boda de la hermana mayor de Yuri y el cerdito ya era tímido antes de eso.

Nosotros relamente nos conocemos principe - continuó Otabeck - pero no me era posible hablar con usted siempre desaparecia despues de dar un vistazo detras de la puerta, posiblemente examinandome? - entre sus recuerdos veía a Yuri ocultandose o espiando - supongo que el principe esta muy ocupado con sus deberes - y por supuesto entre sus recuerdos nosotros, si nosotros, podremos ver a un Otabek distraído que no se da cuenta de la timidez de Yuri.

- Oh bueno yo...

- Podemos continuar luego ? - interrumpió Yurio, estaba aburriendose - los guardias podrían pasar por aqui en cualquier momento y nos reconoceran al instante.

- Por supuesto, solo necesitamos ir a los cuartos con baños termales, se encuentra justamente al final de la feria - Otabek realmente no cambiaba su expresión, señaló la dirección del lugar - su majestad usted primero - se aparto con la mano en el pecho y dio camino a Yuri.

- Claro, es todo recto eh? - Yurio como principe se adelantaba junto a Yuri, pero fue detenido de inmediato.

- Usted caminara a mi lado - dijo Otabeck sujetando su brazo jalandolo suavemente.

El rostro de Yurio termino en el pecho de Otabeck, escuchando sus latidos, eran muy fuertes, rapidos y el lugar cómodo, se miran fijamente mientras que la mano de Otabeck recorria sus mejillas hasta acomodar su cabello, con una sonrisa Yurio se para a un costado y sujeta su brazo - nos vamos ? - Yurio estaba muy feliz y al mirar al frente, alguien parecia haber visto a un fantasma... uno pequeño - qué miras?!

- N... nada - Yuri no lo estaba pasando bien.

La feria no era realmente larga, pero demoraron un poco por Yurio es posible que el pensara que era una cita, asi que todos terminaron con una manzana acaramelada, mascaras y la docena de peces que Otabeck ganó para Yurio, bueno Yuri ganó en el tiro al blanco un peluche en forma de perro para distraerse de todos los momentos romanticos de Otabeck y Yurio, se sentía incomodo, fuera de lugar y el perrito se veía realmente suave.

Porfavor siganme, les tengo preparado una habitación para cada uno si gustan podrían tomar un baño y algun tipo de servicio - el lugar era comodo y se veía limpio pero no podían quedarse toda la noche, Yuri empezaba a preocuparse.

Su habitación joven principe si necesita algo suene la campana lo atenderán enseguida - le explica Otabeck dejando una pequeña campana en la mano de Yuri quien entró a la habitación y observo con poco detalle.

- Gracias, pero disculpe joven Otabeck me diría donde está... - Otabeck desapareció y Yuri dejo la campana en una mesa que terminó cayéndose y provocando ese tintineante sonido, rápidamente Yuri desliza su puerta para llamarlo y ve que entra a una habitación al final del pasillo.

- Es muy probable que esté con Yurio, pero... - entonces un sentimiento brotó en el, uno posiblemente malo, qué hacen? Debería preguntarse eso? Creo que es muy obvio, decidió esperar unos minutos.

- Pero... debo regresar ahora al palacio y... llevarme a Yurio - caminó hasta la puerta donde entró Otabeck, no estaba cerrada correctamente antes de tocar la puerta pensó en mirar, qué tal si los interrumpia? Una excusa poco creíble, se arrepentiria al instante al ver una escena que posiblemente partió en dos su corazón o eso creía, aparto la mirada rapidamente algo como eso no deberia verlo nadie, se deslizó sobre la puerta sentándose dejando a un lado su peluche y en una mano su manzana acaramelada - que mal gusto, no debí espiarlos - abrazó sus rodillas, solo deseaba desaparecer.

Recuperandose del pequeño shoock Yuri no dejaba de pensar más y más - porqué despues de todo, me sigo sintiendo solo? - evitando caer en llanto oculta su rostro entre sus brazos, hasta que siente un aliento cálido en la frente meneando el cabello de Yuri - Vicchan ? - era un perro idéntico al que tenía recordarlo solo lo lastimaba más, pero Yuri no queria terminar llorando de nuevo, solo pensó en acariciarlo pero el can se oculto detras de alguien.

- Yuuri?- una voz suave y que creyó conocer captó su atención.

- ah - Yuri miro fijamente a ese extraño, estaba sorprendido como el, nunca vio a alguien con rasgos muy diferentes, casi identicos a Yurio, ojos azules, cabellos plateados el era realmente hermoso, pero el verlo provocaba un mar de sentimientos que Yuri no podía controlar y mucho menos entender.

- ahh, porqué? - Yuri... estaba llorando.

Continuará...