Le anhelo desde lejos pidiendo tan solo una mísera oportunidad.
Una inane esperanza que decae cada vez que mira los ojos de ella.
Ella, quién me quitó lo que no era mío pero aún así deseaba con todas mis fuerzas al menos una parte de él.
Ambiciono su afecto, reclamo una respuesta, exijo que note mi presencia y no lo hace.
No obtengo más que una mirada impasible, y mi corazón que cae en pedazos por su desprecio.
ESTÁS LEYENDO
FRAGMENTOS DE MI ALMA...
De TodoComencé a escribir esto en mi peor momento y jamás logré terminarlo. Cuando pensamos que la felicidad por fin llega, volvemos a caer en aquel pozo de agonía que parece no tener fin. A un año o más, decidí retomar esto. Se lo prometí a quién probable...