A Veces [ClexaAU]

Capítulo 14

Capítulo 14

Algunas semanas después...

Clarke se despertó algo asustada, demasiada claridad entraba por la ventana, indicándole que quizás se había quedado dormida, tomo su móvil de la mesa de noche y comprobó que realmente era demasiado tarde, tendría que haber entrado a trabajar hacia poco más de una hora, el hecho de que su padre sea el dueño del taller no la dejaba exenta a las llegadas tardes.

Mientras se cambiaba la rubia frunció el ceño, tomo su móvil y comprobó por quinta vez en esa mañana la fecha, comprobó que tuviera señal y que podía enviar y recibir mensajes, todo estaba en perfectas condiciones, solo que su casilla de mensajes estaba vacía, al igual que su WhatsApp y no tenía ninguna llamada perdida, otro hermoso y perfecto cumpleaños dentro de su vida.

Se termino de colocar el mono, guardo su móvil, billetera y una muda de ropa dentro de su mochila. Salió de su habitación y bajo hasta la cocina, su madre estaba allí, preparando el desayuno para Bellamy y Gina.

_ Buen día. – saludo la rubia cortésmente. –

_ Buen día Clarke. – la saludo Gina. –

_ Hola cara de mosca. – Clarke puso los ojos en blanco al escuchar a su hermano. –

_ Hola mamá – Clarke saludo a su madre quien estaba terminando de preparar el desayuno. - ¿Por qué no me has despertado?

_ Estas demasiado grandecita para que te este levantando ¿no crees? –

Clarke simplemente asintió, la manera en la que su madre la trataba iba de mal a peor, lo que la rubia no entendía era, que era lo que había hecho mal para merecer aquel trato, bueno en realidad si lo sabía y también sabía que lamentablemente iba a estar condenada por aquello durante toda su vida.

Busco dentro de la alacena una taza térmica, la lleno de leche que había calentado en el microondas y la corto con un poco de café, se acerco a la mesa y sonrió cuando Gina le dio una tostada con queso y mermelada, la tomo, le agradeció y salió de allí. El día estaba esplendido, aún hacía calor, el otoño se negaba a llegar y el día estaba increíble para caminar y tomarse todo el tiempo del mundo, pero no podía, no porque ya de por si iba llegando demasiado tarde, así que termino rápidamente la tostada, tomo unos sorbos de café y se subió a su bicicleta. Si bien el día no había comenzado de lo mejor, podía decir que estaba feliz, porque quizás ese día podía terminar su auto y usarlo por primera vez, ya lo habían terminado de arreglar y de pintar, solo le quedaban algunos detalles que Nyko y Jackson tenían que revisar.

Clarke llego al taller, guardo la bicicleta, lavo su taza y fue a buscar a su padre, quien estaba hablando con algunos clientes. Jake le sonrió y continúo hablando, así que la rubia simplemente lo espero en un costado.

_ Hola bella durmiente. – Jake la abrazo – feliz cumpleaños. – le dijo al oído.

Clarke cerro sus ojos y abrazo con más fuerzas a su padre, había creído que él también lo había olvidado.

_ Tengo una sorpresa para ti. –

_ ¿Sí? ¿Qué cosa?

_ Ven, sígueme. –

Clarke siguió a su padre hacia la parte trasera del talle. Al llegar allí, Clarke noto que su automóvil estaba cubierto, la rubia miro a su padre quien le sonrió y asintió con la cabeza como diciéndole que podía destapar el automóvil.

La rubia no espero mucho más, se acerco y le quito la manta que lo cubría, los ojos azules de Clarke se iluminaron como nunca antes cuando vio su automóvil completamente terminado, brillando por todos lados. Rápidamente, Clarke abrió la puerta y miro en su interior, todo, absolutamente todo brillaba, estaba impecable, como si hubiese salido directo de fábrica, era un modelo viejo, pero fue reformado a nuevo con sus propias manos y fue reparado de chapa y puntura también por sus manos con ayuda de Nyko y Jackson.