Capítulo 28. Votos parte I

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POV Narrador.

Sherlock se miraba en el espejo, pestañeaba lentamente cuando fruncía su ceño.

-Bien, no sé cómo decirte esto – Puso una mano en su nuca – pero, me gustas mucho Bri – Intento sonreír, pero no pudo - ¡Vamos sé más creativo! De acuerdo, empieza de nuevo – Suspiro, relajo su rostro – Me gustas ¡ARGH! Así no va a tener ninguna sorpresa.

-John me llamo querido, dijo que guardaras tus cosas porque van a catear el apartamento –La Sra. Hudson miro a Sherlock con una sonrisa, cuando noto que se había puesto tenso.

-Qué escucho de lo que estaba diciendo – Pregunto Sherlock con evidente angustia.

-Mmm Sherlock, siempre escucho la mayoría – De repente el azabache puso su ceño fruncido.

-Por qué registraran el apartamento – Ella alzó una ceja.

-No entendí bien que dijo John, pero fue de unos exámenes de Bri, ella también me hablo por unos papeles – Sherlock entonces se quedó pensativo "Entonces salieron positivos... Extraño, ella ya no lo hacía tenía entendido, y si lo hizo ¿Por qué no me dijo? – se preguntó con un poco de tristeza" - ¿Así que al fin te le vas a declarar?

-Riccio sacudió su cabeza – Sí – dijo entre dientes.

-Y cómo se lo dirás – La casera se sentó emocionada y con una sonrisa.

-Primero iré a guardar lo que me corresponde – Ella suspiro, pasaron unos minutos hasta que regreso – Bien, le diré: Me gustas.

- ¿Así no más? – La Sra. Hudson pestañeo levemente.

-Pensaba decirle algo más pero no sé cómo se hace – Sherlock se sentó en frente de la casera.

-Hazlo con algo que tu veas normal, los poetas lo hacían con versos, los pintores regalaban pinturas – Ella se encogió de hombros.

- ¡Ya sé! Se lo diré así – Se levantó y miro directamente a la Sra. Hudson – Tus feromonas han llamado mi atención por completo, es como si mi ADN necesitara de ti, siento que podemos ser una mezcla homogénea que puede provocar enlaces covalentes en nuestra vida, reaccionar y hacer una combinación contigo es lo que más deseo... - Se detuvo al ver el rostro de la casera, parecía perdida - ¿Qué tal?

-Sherlock, confió en tus dotes de improvisación, porque eso no sé si sea romántico – susurro antes de escuchar unos timbrazos, que cada vez se hacían más persistentes - Ay Dios, cuantas veces más revisaran mi apartamento – La anciana puso cara de preocupación mientras se ponía en pie y caminaba directamente a las escaleras.

- ¡Ya saben que revisar! Cualquier indicio de droga deben tomarlo como prueba – Sherlock se encamino desde su sillón hasta la puerta de la Sala de Estar para luego bajar las escaleras poco a poco – Buenos días – dijo el policía al verlo quedarse parado en la última grada – Quisiera hacerle unas preguntas si es posible.

Sherlock guardo silencio, la puerta estaba abierta, lo único que quería era ver a Bri entrar por ella. Necesitaba saber cómo estaba, de golpe su pulso se había acelerado.

Asintió al hombre, pero no lo dejo subir, se mantuvo parado ahí interponiéndose entre el segundo piso y él.

- ¿Conoce a la acusada? – Él volvió a asentir.

-Tiene alguna relación con ella – Sherlock dudo decir algo, todo podía ser usado en contra de Bri.

-Amigos – contesto – Con interés amoroso – agrego siseado. El policía pareció no escuchar lo último.

My Deception (Sherlock)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora