My Deception (Sherlock)

Capítulo 33. Capítulo Especial: Sherlock III

POV Narrador.

Sherlock estaba sentado en una banca del parque mirando hacia el piso, miraba a los otros adolescentes caminar en grupos, otros escuchando música y la mayoría se miraba feliz. Su mamá lo había obligado a salir de su cuarto e ir a caminar a otro lado.

"Esto es una estupidez mis experimentos no se van a continuar solos" Pensó mientras ponía sus ojos en blanco, cerró sus ojos intentando dejar de escuchar todo a su alrededor.

-Hola Sherlock – Abrió los ojos mientras fruncía el ceño, la chica rubia se sentó al lado de él sin pedirle permiso – Pensé que no saldrías hoy.

-No iba a hacerlo – Susurro sin ninguna expresión.

-Entonces ¿Por qué estas afuera? – Pregunto la rubia mientras miraba al azabache con curiosidad.

-Farrah a mí me obligan a salir, de ser por mí simplemente me quedara en casa sin convivir con idiotas – Sherlock puso sus ojos en blanco.

-Ay no seas tan amargado – dijo ella acercándose más al joven Consultor – Vamos a caminar – Ella le tomo la mano a Sherlock y lo jalo, él tenía puesto un suéter color negro una camiseta blanca, unos jeans y unos converse negros. Empezó a caminar de mala gana con ella por el sendero que rodeaba el parque – Sherlock. Sé que te drogas.

-Él se encogió de hombros – Yo sé que no eres virgen, que también te drogas que robas, que le quitaste el novio a Cindy de tercer año ¿Continuo?

-Ella frunció levemente sus labios – Me gustas mucho.

-Sherlock la miro con confusión - ¿Perdón?

-Sí me gustas, no me digas que no lo habías deducido.

-Sinceramente eso no me importa – Ella se río lo que confundió más a Riccio – El amor es un error químico del ser humano.

-Sí, pero, no pierdes nada con intentar probar algo nuevo – Él alzó una ceja – Como un experimento.

-Prefiriese drogarme – Ella se rio - ¿Por qué te ríes?

-No sé contigo me rio a cada rato – Dijo ella mientras se encogía de hombros.

-Ya lo noté – "Es la persona a la que más tolero, a pesar de su idiotez". Farrah se detuvo en seco haciendo que el azabache también se detuviera, se paró de puntitas y lo beso. Sherlock se quedó estático sintiendo como ella movía sus labios sobre los suyos, de repente sintió las manos de ella en su cabello. Él se separó con los ojos como platos - ¿QUÉ HACES?

-Fui tu primer beso Holmes – Sherlock se limpió los labios con su mano, mientras la rubia se reía levemente.

-Qué asco – susurro mientras seguía limpiándose.

-Farrah qué haces con ese rarito – Uno de los chicos de la escuela paso al lado de ellos, mientras miraba con desprecio a Sherlock – Déjalo y ven conmigo primor – El chico tomo de la cintura a Farrah y la jalo al lado de él – Te mereces algo mejor.

-Suéltame Josh – Farrah se forcejeó, pero el chico no la soltaba.

-Te dijo que la soltaras – Josh observo a Sherlock, el azabache trago grueso, se acababa de enfrentar al matón de la escuela, y a pesar de todo él estaba consciente de lo fuerte que golpeaba Josh.

-Josh empujo a Farrah que cayó al suelo - ¿Repite eso cerebrito?

-Ya la soltaste para qué lo repetiría – Contesto Riccio mientras retrocedía unos pasos – ¿O eres tan idiota que no escuchas, porque tu estupidez te deja sordo?

No contesto, simplemente se lanzó sobre el joven consultor para golpearlo, Sherlock solo alcanzaba a poner las manos en su abdomen, el chico comenzó a ahorcarlo Sherlock puso su mano sobre una de las manos de él mientras fijaba sus ojos en los castaños de Josh.

-No vuelvas a atreverte a intentar llevarme la contraria – Sherlock encontró lo que parecía una rama con su mano libre entonces la levanto y golpeo al chico en la cabeza que aflojo su agarre por el impacto.

El joven azabache aprovecho para darle un puñetazo y liberarse, tomo aire, para toser levemente.

-Ambos quédense quietos, creo que deberán acompañar – Sherlock identifico a un policía que era el que hablaba.

***

Sherlock estaba sentado en una celda, mirando hacia el suelo de nuevo. Le dolían los golpes que le había dado Josh, y pensó que había sido un estúpido, a pesar de saber luchar, no lo miraba necesario.

De repente escucho unos pasos entrar al pasillo para poder verlo.

-Gracias – susurro Farrah desde el otro lado de la celda, él no la observo – En serio siento que te hayan golpeado.

Riccio solo se mantenía en silencio.

-Tu mamá ya pagó la fianza – Él levanto su rostro.

- ¿MAMÁ? – La puerta volvió a sonar.

-SHERLOCK HOLMES – El azabache puso los ojos como platos – TE DIGO QUE SALGAS Y VAS Y HACES ALBOROTO EN LA CALLE.

-Sra. Holmes, fue mi culpa – Farrah miro a los ojos fríos de la madre – Él intento defenderme.

-La madre miro a su hijo que parecía asustado y suspiro – Bueno, igual estas castigado sal de ahí.