Acuérdate de mi

Un no muy feliz inicio

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Eran las 6:30am y Rachel estaba desayunando un plato de cereales mientras veía las noticias, en ese momento sonó el timbre de su casa. Camino lentamente hacia la puerta pues creía que era alguno de sus padres que había olvidado algo pero estaba equivocada. Al abrir Quinn estaba parada en el porche.

-Hola, perdón si llegue muy temprano pero no aguantaba las ganas de verte –inmediatamente le dio un pequeño beso en la boca.

-Esta perfecto. Yo te extrañaba igual. Pasa. ¿Quieres desayunar?

-Te aceptare un plato de cereal igual. Es que por las prisas no tome nada.

-Claro, toma asiento en el sillón, en un momento te llevo tu plato.

-No, me quedare aquí si no te molesta.

-Bueno, aquí tienes –le entrego un bowl de cereal y se sentó a su lado- ¿Cómo dormiste ayer?

-Perfectamente –de repente recordó lo que iba a preguntarle a su novia- Oye Rach, si no es indiscreción… ¿sobre qué quería hablar Brenda contigo ayer?

-Pues, solo… ella… -Rachel no se había puesto a pensar que le diría- Okay, voy a decirte la verdad pero necesito que me prometas que no te enojaras o harás algo exagerado ¿sí?

-Mejor dime Berry, me estas espantando.

-Pues, nos sentamos y ella estaba hablando y de la nada… me beso –la cara de Quinn cambio de curiosidad a enojo en cuestión de milisegundos- No espera. Le dije que yo solo la veía como una amiga y que nunca podría pasar algo entre nosotras. Y  se fue.

Fabray no podía aguantar el coraje, tenía planeadas muchísimas cosas para hacerle a la idiota esa. Pero recordó lo que le había prometido a su novia y se calmó un poco.

-Sabía que ella quería algo contigo. Yo lo sabía –dijo entre dientes.

-Sí, pero eso no importa, ahora solo te pertenezco a ti –le dio un pequeño beso- Ahora debemos irnos, se nos hará un poco tarde –la rubia asintió y ambas tomaron sus cosas, subieron al coche de Quinn y se encaminaron a la escuela.

Todo el día pasó sin más contratiempos… Solo otra invitación de Finn, pero no hubo rastros de Brenda sino hasta dos días después. Pasaron 2 semanas antes de que Fabray les confesara a sus amigas que salía con Rachel.

-¿Con la hobbit? ¿Enserio Fabray? –Santana no podía creerlo.

-Cuidado con lo que dices López, yo no te he criticado sobre en quien tienes los ojos.

-¿Qué quieres decir? –la voz de  la latina sonó alterada.

-A Sebastián, es guapo sí, pero es un patán.

-Bueno, yo no me meto –San se encontraba mucho más tranquila- es tu pareja después de todo.

-A mí me parece genial Q –Brittany en verdad sonaba sincera- Yo solo quiero que seas feliz.

-Gracias Britt, ahora debemos seguir practicando –las tres chicas se levantaron del piso y continuaron con su actividad.

Rachel por su parte ya se lo había contado a sus padres y a Noah y los tres se lo tomaron muy bien. Pero ambas chicas les pidieron a los que ya sabían que por favor no dijeran nada pues aun no sabían cómo harían saber su relación a las demás personas y mucho menos sabían cómo decírselo a los Fabray. Pero por ahora eso no les importaba mucho, ellas seguían felices con su romance. Pasaban todos los días juntas excepto los domingos, y cada vez hacían algo diferente a lo del día anterior. En ocasiones iban a su prado, al cine o se quedaban en casa de alguna. Para ellas el lugar no importaba, con que estuvieran juntas les bastaba.