•Butterfly•

El calor de un cuerpo se apoderó de mí sueño, además de lo acalambrado que estaba mi brazo izquierdo por estar sosteniendo un pequeño bulto que no apartaba la mirada de mí, sonreí por verlo tan inocente y como sus ojitos seguían cada movimiento que podía hacer, bese su nariz y de inmediato escuche una risita, -¿Minnie que deseas desayunar hoy?-, le dije mientras acariciaba suavemente su mejilla, -ummmm, recuerda que debe ser algo no muy pesado, recuerda siempre eso, o podré vomitar en el baile de hoy-, sonrió tímido, -podrias comerme, no peso mucho y soy un buen nutriente-, una carcajada fue lo que escuché seguido de un quejido que reprochaba mis palabras.

La mañana se nos pasó entre risas y juegos, tirandonos la masa de panqueques en la cara y dejando medio relajo en la cocina, al final obtuvimos unos panqueques a medio hacer y un poco quemados, no quedándonos como opción comer cereal, uno de honey monster que era el favorito de Jimin, en ocasiones me preguntaba si yo tenía novio o un niño a medio criar; -oye Jimin, ¿Te gustaría ir al parque hoy?, Digo antes de que vayas a entrenar, a penas es medio día y no hace tanto sol gracias a la nieve-, podría jurar que sus ojos brillaban más que un diamante,- ¿En serio hyung, podemos?-, dijo con un tono tan dulce que derritió mi alma, -claro que podemos, anda cámbiate ya que pareces un niño sin hogar-, bromeé ganandome un puchero como reproche, ese niño me estaba volviendo loco.

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1:00 p.m, estábamos en el parque de diversiones que apenas descubrí ayer, no sabíamos a que atracción subir, pero debía ser un poco rápido porque Jimin debía ir a su entrenamiento, tomamos como primera opción la casa embrujada, aunque si me preguntan entraría en ese lugar las veces necesarias solo para ver cómo Jimin se moría del miedo y se aferraba a mí; pasamos entre varios juegos como la montaña rusa donde Jimin no paró de gritar y sujetar mi mano mientras yo me reía, la rueda de la fortuna donde se recostó en mi mientras admirabamos el paisaje y creo que la actividad más agitada fueron los carritos chocones.

-Minnie mira, algodón de azúcar, ven aquí-, lo jale de la mano, combinaba tanto con lo rosa de sus mejillas que no paré de sonreír como un enamorado.

Estuvimos hora y media hasta que yo recibí una llamada por parte de Namjoon quién se encargaba del desarrollo de mi disco, pude notar la tristeza en sus ojos, me disculpé varias veces y besé su frente prometiendole verlo en la noche en su presentación e ir al parque de ayer.

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Tarde, era malditamente tarde de nuevo, Jimin no me perdonaría esta vez, la calle en reparación sumándole la nieve, el tráfico era un infierno, un mensaje me sacó de mi frustración, era él.

Mi chico ♥:

Hyung!!, De nuevo verdad, vienes tarde de nuevo, lo sabía!!.

Min Min ♥:
Minnie por favor no te enojes, no fue intencional, Namjoon y yo, bueno tú sabes y el tráfico no ayuda.

Mi chico ♥:

Sabes qué, no te atrevas a venir Min Yoon Gi, no te necesito, he hecho esto tantas veces....

Min Min♥:
Minnie por favor, ya casi llego..

Visto a las 17:05.

La desesperación me envolvió y al solo ver una salida aceleré como si mi vida dependiera de ello, tomé el celular que se me había caído para marcarle y lo inimaginable sucedió, unas luces fue lo último que ví antes de que todo se volviera negro, como si de una película se tratara, Jimin pasó ante mis ojos.

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Como mariposa, debemos comprender que nuestra vida es fugaz y pasajera, por eso debemos ser como las mariposas, bellas en el sentido de amar y dejar cosas buenas porque nuestro rastro es temporal.

Borroso como la neblina, esa fue la primera impresión que tuve, la vista borrosa, una ambulancia en frente y un Jimin destrozado a mi par, intenté hablar, pero se me hizo inútil, me dediqué a escuchar.

-Hyung, perdóname, yo no quería que esto pasara, yo no, solo me rehuso a creer en lo que mis ojos ven-, las lágrimas salían sin control y como pude deposité mi mano en su mejilla, -Yo estoy en frente de algo que no puedo reconocer, Hyung debes resistir, te paraste a mí lado toda mi vida, ¿Dime cómo podré seguir?, Solo resiste-, decía entre lamentos que me hacían sentir el peor ser del mundo, perdí la conciencia de nuevo.

[Prov Jimin]

Las maquinas están sonando, ante ellas puedo escuchar el soporte de su vida bombear, la línea entre la vida y la muerte no viene mas claro que esto, una mascara de oxígeno cubre su rostro y no dejo de llorar, ¿entonces estas palabras serán sus ultimas?, con la energía que le quedaba después de haber recobrado la conciencia  de sus labios simplemente salieron ciertas palabras que me dejaron petrificado en mi lugar.

-No puedo estar a tu lado hasta el final del mundo como dije que lo haría; yo, yo no podre ayudarte a cargar el peso del mundo.-

De repente perdí mi fuerza, que no es de extrañar cuando las cosas se ponían difíciles, como siempre acobardandome ante la situación, me atreví a sobar su herida mejilla y dejé salir todo el dolor que se estaba empuñando en mi pecho.

-Cuando sea que tengo preguntas, tu siempre tienes las respuestas, tú me contaste de la vida y de la importancia de ser tu mismo, lo que eres, el hecho de valorar la honestidad-, sentía mi garganta quemar tras cada palabra pero continúe, -dime Hyung, ¿Que haré sin ti?-, solo miraba sus pupilas dilatadas, podría jurar que su vista estaba perdida y solo me solté a llorar.

[Prov Suga]

-Se supone que no deberias verme así y lo siento Jiminnie; diría que no es verdad, pero te vere pronto, lo prometo.-

Desde lo lejos aunque sea la única manera.

Tomé sus manos entre las mías apartandonos del líquido espeso que cubría mi ropa, lo miré directo a los ojos y suspiré.

-No puedo estar a tu lado hasta el final del mundo como dije que lo haría; Yo, no podre ayudarte a cargar el peso del mundo.-

Lo miré a los ojos, sintiéndome culpable por verlo derramar tantas lágrimas y no de felicidad como solían ser cuando lo besaba por haber ganado algunos de sus campeonatos.

-Mi pequeño Minnie-, le susurré, sentía mis pulmones a punto del colapso y respirar me dolía como el mismísimo infierno, -Ya no llores Minnie, mi tiempo ha llegado silencioso como una mariposa, pero estare volando a tu lado, viendo sobre tí, silencioso como una mariposa.-

Una capa de confusión me envolvió y sus gritos se escucharon ensordecedores, supe entonces que me estaba entregando a la luz y que mi tiempo había llegado, pero cumpliría mi promesa, vigilaria al ser más hermoso del mundo, a mi hermoso Minnie.

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Lo que menos deseo es morir, fue una idea un poco cruel lo tengo entendido, pero había que aprovechar la inspiración, díganme si les gustó.

Se despide, Maru 🍃♥