El ángel esta sentada en una roca mirando el día hacerse noche con la luminosidad de las estrellas aprareciendo una por una en las lejanías del cielo pero, su tranquilidad es invadida por un intruso. Puede sentir la presencia de alguien acercarse, pero no teme de quién sea si no de lo que pasará.Un demonio cruel condenado del infierno, fiel a la maldad que lleva en su sangre y a su padre Lucifer, observa al hermoso ángel y sus deseos se posan en esa pura figura femenina que no ha sido manchada por la oscuridad.
Emerge de su escondite y a paso seguro se acerca a ella mostrando sus garras llenas de sangre y sus afilados dientes, de su espalda comienzan a salir nueve colas hermosas pero peligrosas, el ángel mira a este demonio pero no hay muestra de miedo o de repulsión hacia él.
¿Será que querrá morir? ¿Será que no comprende su situación?Él demonio se posa frente a ella pero el ángel no se mueve y eso lo enfurece, la acorrala contra un árbol cercano y ruge mostrando su odio hacia ella, pero solo alarga su mano y acaricia su mejilla con suavidad; Eso lo confunde, los ángeles nunca podrán tocar a un demonio pero ella parece no impórtale y lo abraza con un cariño nunca antes visto.
El amor se encuentra y llega en el momento menos esperado, el amor es un momento que puede perdurar por siempre en un corazón que no lo rechace.
Él demonio la aleja y la tira en el suelo posicionándose sobre ese bello ángel. Sus trucos no podrán engañarlo, no esta vez.
—Me alimentare de ti. Beberé tu sangre y carne, no tendré compasión si no te largas, vete de aquí ángel, estás en tierra de demonios. Otro no lo dudara dos veces.
—No importa, si quieres matarme no te lo impediré, pero deberás cumplir una promesa.
—Los demonios no hacemos promesas, ángel estúpido —ruge furioso.
—Puede ser, pero nadie nunca a dicho que no puedas hacer una.
Él demonio penetra con sus ojos llenos de oscuridad con los iluminados de aquel ángel. Curioso de aquella promesa, ¿porque un ser de luz pediría algo a un ser de las sombras? ¿Porque siempre tenía que volver?
—¿Cúal seria esa promesa, ángel?
—No lastimaras, no volverás a llenar el corazón de otros con odio, tu corazón latera en mis manos y yo lo cuidaré de todo mal, no obedeceras las ordenes de vuestro padre Lucifer, he visto tu soledad —su voz era cálida con cierta tristeza en el fondo— puedo sentir tu dolor y duele dentro de mí.
Él ríe hipócritamente, el odio no podrá abandonar su corazón y él esta a ordenes de su padre pues él nació del odio, entre las crueles criaturas del infierno y su destino es ser tan o más despiadado que su mismo padre.
—Para ser un ángel eres muy ingenua, ¿Por qué debería hacer semejante estupidez?
—Porque desde ahora soy tuya, nuestros corazones juntos siempre estarán y mi amor ha de cambiarte, amor mío. Ninguno de los dos estará solo de nuevo.
Los ojos del demonio se hablandan, ese ángel es muy bondados, siempre la ha visto pasear por los coloridos jardines de flores más siempre en soledad. Hasta ese día que sus miradas se encontraron teniendo una conexión al instante.—No digas cosas que no pasaran, yo nunca cambiaré ángel mío —la miro a los ojos y junto sus labios que nunca debieron ser juntados— sabes que nunca podremos estar juntos, no debes estar aquí, vete y no vuelvas. Si uno de los sirvientes de mi padre te descubre sabes lo que pasará. No puedo cambiar y no puedo amarte.
—Nuestro amor lo hará, esa es mi promesa para ti mi amado. —dice aquel ángel tocando el corazón del demonio— no digas que no puedes amar mientras tu corazón late, no lo rechaces, aceptalo por favor.
—Esto terminara mal, pero ahora solo te haré mía ángel, hoy nacerá nuestra unión prohibida y serás mía, me perteneceras toda la eternidad, aun que sea este el único y último de nuestros encuentros.
Él toma entre sus brazos y ella se entrega con su alma, se unen en uno solo en su danza de amor maldito, el demonio se une al ángel y el ángel se une al demonio, su amor prohibido por el destino siempre ha de ser.
Pero para el amor no existirá pecado o castigo que no valga la pena pagar.
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Tú mi ángel, yo tu demonio (Naruhina)
Romance-Seré tuya pero deberas cumplir una promesa. -Los demonios no hacemos promesas, ángel estúpido. -Tal vez, pero nunca nadie a dicho que no puedas cumplir una.