Capítulo Siete. [Nella]

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·Nella·

-Un consejo. A Liam le gustan las chicas sencillas.

Y se va... ¿Y ya? Supongo que dejaré que mis rizos caigan. Me coloco mi sudadera negra, que por cierto no tiene capucha. Es rara. No es anchísima, es como una camiseta pero en gordo. Me pongo mis calcetínes anchos y me coloco mis Lita. Cojo mi bolso pequeño y meto en él mi móvil, pañuelos, compresas, llaves... Todo. Coloco mis gafas de pasta en su funda y las meto en el bolso. Me miro al espejo. Estoy como nueve centímetros más alta. Me veo bien. Sencilla. Aplico un poco de rímel en mis pestañas. Algo de polvo en mis mejillas y me vuelvo a mirar al espejo. Me siento bien. Salgo de mi baño y cojo algo de dinero y lo guardo en mi cartera. Cojo mi gorro de lana negro, indispensable, y me lo pongo con cuidado de no destrozar mi pelo. Salgo de mi habitación y veo a Liam sentado en el sofá, viendo un partido de fútbol. Me siento a su lado y lo miro sonriendo. Dejo ver mi corrector de dientes. El mes pasado me pusieron las gomas de color azul muy claro. Liam se gira y sonríe también. Se levanta y me ayuda a levantarme. Coge una de mis manos y me mira a los ojos.

-Nella, dios mío. Estás preciosa.-Dice entusiasmado.

-No es para tanto Liam. Me he vestido normal, como todos los días ¿sabes?

-Es que todos los días estás preciosa.-Me sonrojo y sonrío. Me mira y me da un beso en la mejilla.

Derrepente aparece Niall en calzoncillos delante de nosotros y nos mira. Pone su dedo índice apuntando a Liam.

-A las diez en casa. Nada de besos. Mucho menos de sexo...-Le corto.

-Niall, tengo la regla. Por favor, sería asqueroso. Además, falta media hora para las diez.-Suspiro y lo abrazo.-No te preocupes por mí. Liam es muy dulce, dudo que se propase conmigo. Es más, lo niego. Niall, se cuidarme. Te quiero.

-Aww.

-Nos tenemos que ir. Pediros unas pizzas, y solo puede cocinar Zayn.-Digo saliendo.

[...]

Salimos de el portal. Hace frio. Demasiado frio. Estoy temblando. Liam lo nota y se quita la chaqueta.

-No, Liam.-Alza una ceja.-De verdad.

Le da igual lo que diga ya que me ha puesto la chaqueta por encima. Pasa un brazo por mi espalda, justo encima de mi trasero. Yo hago lo mismo y apoyo mi cabeza en su hombro. Liam saca las llaves del coche y lo abre. Un Ferrari negro. Entro en la puerta izquierda y él en la derecha. Dicen que en España conducen alrrevés. No sé a que ha venido este dato. Me tiemblan las piernas, y no es por el frio. Liam ha encendido la calefacción.

>>Te atrae.

¿Quien?

La persona de tu lado.

Oh, pensaba que Liam era una silla.

Ja-ja-ja eres muy graciosa.

¿Quien cojones eres?

Tu preciosa y maravillosa conciencia.

Oh, ¡hacía mucho que no hablabas conmigo Federica!

Touché. Me rindo.<<

-¿En que piensas?-Dice Liam dejando de mirar a la carretera.

-Pues no lo sé.-Liam vuelve a desviar su mirada hasta la carretera.-En Federica.

-¿En quien?-Dice riendose.

-Llamame loca, pero mi conciencia se llama Federica. No para de rallarme la cabeza.-Digo haciendo gestos con mis manos. Liam estalla a carcajadas y me mira.

Lo que te conté mientras dormías. | Sam Clafin. [PAUSADA.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora