ASCO

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ESCENA QUINTA

-Nerea entra tambaleándose en el baño, despeinada y entre lloros choca con el mármol de las pilas y entra en uno de los lavabos. Cierra la puerta con pestillo y se asegura de que nadie la había seguido.-

-Nerea: No quiero seguir dando asco. –Se seca las lágrimas y se arrodilla frente al váter. Levanta la tapa y respira hondo.- Sólo un par de veces al día. –Intenta introducirse dos dedos en la boca. Tose. Se le saltan las lágrimas y se aparta el pelo de la cara. Vuelve a intentarlo, esta vez con tres dedos. Simula alcanzar la úvula y sufre la primera arcada. Se saca la mano de la boca y golpea el váter con rabia.- Puedo, joder, puedo. Sólo tengo que hacerlo más a menudo. –Se acerca de nuevo la mano a la boca. Cuatro dedos entran en ella, las arcadas se suceden, Nerea se retuerce y finalmente vomita. Queda inmóvil, debilitada, intenta levantarse pero le tiemblan los brazos. Se le resbalan y se da un golpe en la frente. Aún debilitada y algo magullada consigue ponerse en pie, acciona la cisterna y desbloquea lentamente el pestillo. Se limpia la boca con el antebrazo y sale del baño poniendo rumbo a clase.-

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