11~Novato

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  -You've been on my mind (Tú has estado en mi mente)

I grow fonder every day (Siento más cariño cada día)

Loose myself in time  (Me pierdo en el tiempo)-  las palabras salían de mi boca al ritmo de aquella canción de Adele-

Just thinking of your face  (Solo pensando en tu cara)

God only knows (solo Dios  sabe)

Why it's taking me so long to let my doubts go (Porqué me está tomando tanto dejar ir mis dudas)

You're the only one that I want  (Tú eres el único al que quiero) - mis manos acompañaban la canción presionando algunas de las 88 teclas del piano.

I don't know why I'm scared, I've been here before (No sé por que estoy asustada, ya he estado aquí antes)

Every feeling every word, I've imagined it all, (Cada sentimiento, cada palabra, lo he imaginado todo)

You never know if you never tried to forgive your past (Tú nunca lo sabrás si nunca has intentado olvidar tu pasado)

And simply be mine   (Y simplemente ser mío)-mis sentimientos estaban a flor de piel, justo para llegar a la parte de la canción donde podía sentirlo todo. Eso es lo que hacía la música para mí.

Conseguir hacer vibrar cada parte  de mi cuerpo.

-Madre mía hermanita, que mal cantas.- Cyro Puvill, estropeando momentos desde su primer segundo de vida. Me giré para verle. Levaba su pijama, es decir, unos pantalones cortos y una camiseta de tirantes, y sí, estábamos a primeros de diciembre.

No era extraño que viniera así puesto que eran las once de la mañana de un domingo cualquiera y eso significaba varias cosas de las que hice una lista escrita a los 14 años. Se cumplió cada semana hasta que cumplí 21:

1.Alayn no estaba: tenía partido.

2.Neilan estaba pintando un cuadro a la par que escuchando a Ed Sheeran en sus auriculares, por lo tanto como si no estuviera.

3.Papá y mamá estaban en alguna organización/entrevista/brunch benéfico (aún  no comprendo al completo el concepto del brunch)

4.Cyro estaría paseándose por la casa y a ser posible molestándome.

5.Yo estaba tocando el piano y cantando.


Mi hermano llevaba una bolsa de gusanitos en la mano, al verla me irrité profundamente.

Hay muchas cosas que me gustan y muchas cosas que no me gustan en la vida. En cambio hay muy pocas cosas que amo y otras muy pocas que odio. Una de las cosas que odio es que mi piano se manche, se ensucie o se ponga pegajoso.

Mi hermano Cy junto a una de sus bolsas de los famosos tubitos de maíz es muy capaz de hacer las tres cosas a la vez.

-¡Fuera!

-Pero...-intentó recriminar.

-Si te quedas no hay comida.-viendo sus intenciones para hablar decidí hablar yo antes-No hay negociaciones sobre eso.

-Está bien...-dijo aunque sin demostrar gran entusiasmo.

Miré a mi hermano para después mirar al piano y así hacer que una idea recorriera mi cabeza.

-¿Tocamos una canción?

-Ni de broma.-no lo llegó a pensar ni dos segundos.

-¡Pero si te encantaba!-le reclamé intentando hacer que mi hermano compartiera ese momento que hacía ya un año que no compartíamos.

~Te metes con uno, te metes con todos~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora