Cuando oí aquellas palabras salir de su boca, no evité sentirme feliz.
Por un momento quería abrazarlo, pero sabía que si actuaba asi, llegaríamos a una situación incómoda. Así que mi instinto hizo que le revolviera su lindo esponjoso y rubio cabello.
—¡Oh venga! No soy tu hermana o algo por el estilo.. Pero igual yo tambien te aprecio mucho idiota—Le sonreí y tiré de su mejilla con poca fuerza.
—H-hm.. Ya se que no eres mi hermana, pero es inevitable llegar a pensarlo.—Kaminari sobó su mejilla mientras que me miraba de reojo— Cambiando de tema, ¿te acompaño a casa? No me gustaría que te volviera a pasar lo de esta mañana.
—¿Ah?— Me quedé curiosa ya que no sabía de que me estaba hablando.
—¿Ya se te olvidó? Si que tienes mala memoria..— Cogió mi mano derecha con cuidado mientras la miraba calmado.
—¡A-ah! Si si.. Es cierto, no te preocupes estoy bien. No está muy lejos y suele pasar gente por esas calles a estas horas.—Asentí con seguridad.
—Bueno si llegará a pasar algo, no volvería a dejar que fueras sola a ningun sitio nunca mas.—Me miró a los ojos con seriedad y preocupación.
—¡Vale vale! Anda vete a casa tu madre te estará esperando.. ¿Hablamos mañana?—De forma dulce dije mientras me alejaba marcha atras.
—Eso siempre enana. ¡Ten cuidado! Hasta mañana—Se despidió con la mano mientras me mostraba una de sus mejores sonrisas.
Lo miré irse, y nada más ver que se giraba, no evite sonrojarme y morder mi labio inferior. Nunca tuve tantas ganas de querer abrazar a alguien, mientras caminaba no podía sacarle de mi cabeza. No paraba de pensar en lo genial y tierno que hubiera sido besarlo en esos momentos. Trataba de cambiar de tema para mi misma, y observe mi mano derecha. Llegué a estar tan feliz que ni me di cuenta de que me dolía.
Después de un largo paseo de pensamientos demasiado profundos, llegue a casa. Entré por la puerta y lo primero que hice fue dirigirme a la cocina para poder beber algo de agua. Quise avisar a mi madre de que había llegado, pero ella se quedó dormida en el sofá con la televisión encendida. Así que decidí acercarme para apagarla y colocarle mejor la manta que tenía puesta. No tenía hambre así que subí a mi cuarto para poder cambiarme y tumbarme. Cogí mi teléfono rezando para poder tener algun mensaje de él. Y después de tanto rezar mi sueño se cumplió realidad, mi teléfono estaba repleto de mensajes. Unos eran del grupo, otros eran de mi mejor amiga, pero los más importantes fueron aquellos tres de Kaminari.
Mi instinto de adolescente enamorada hizo que nada mas entrar a la aplicación diera click a su chat para poder responder.[Kaminari-kun <3]
[Mensajes antiguos]
[¡Oye! ¿Llegaste a casa? Siento sonar pesado pero es que me tienes algo preocupado] 22:32
[Justo ahora me di cuenta de que no llevaste tu teléfono, soy un desastre ಥ_ಥ] 22:37
[Bueno, cuando llegues a casa mandame un mensaje, ¡y que no te de vergüenza! Que necesito saberlo ( ̄^ ̄)] 22:40
[Mensajes nuevos]
[Por un momento pensé que hablaba con mi madre xD.
Vale no, es broma. Ya estoy en casa, gracias por preocuparte.][¡Que alivio enana! Pensé que te había pasado algo..]
[Sabes que yo ando poco y tardo mucho para llegar a los lugares;;]
[Si, eso lo se, pero desde que te pasó lo de esta mañana, pienso que debo preocuparme mas de ti como en los viejos tiempos]
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"Esperando A Que Me Correspondas" - Boku No Hero Academia - [ Kaminari X Tu ]
Fanfiction"Kaminari, un amigo de tu infancia, con el cual pasaste todo tu niñez y pre-adolescencia. Pero al tu no tener ningun super poder, llegó una etapa dura. El pasó a la escuela donde los mayores heroes estudiaron, la UA, y tu, simplemente a una academia...