Capítulo 10

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Tom se puso un elegante traje azul marino y una corbata del mismo color, estaba un poco nervioso porque era la primera vez que salía con Scarlet, por fin la chica había aceptado que se vieran fuera del trabajo y no quería desaprovechar esa oportunidad. Aunque casi se vio obligado a también invitar a su asistente a aquella cena, pues sabía que si Gloria aceptaba su compañera también lo haría.

Se acomodó las mangas del traje antes de salir de su habitación de hotel. Llegó al punto de encuentro y ninguna de las chicas había llegado. Su celular sonó indicándole que tenía un mensaje de WhatsApp, de inmediato entró en pánico.

"Comer 4 helados seguidos no fue tan buena idea. Se divierten y comen rico, lo siento", le escribió Gloria.

"¿Estás bien? No te preocupes, tendremos oportunidad de cenar en otra ocasión", respondió el actor.

— ¿Ya te avisó Gloria que se siente mal?— preguntó Scarlet cuando se detuvo frente a él.

— Sí, me acaba de decir que comer los 4 helados no fue tan buena idea— Tom se acercó para saludar a la asistente de Hugh.

— Ni modo, ¿quieres ir a cenar aún?— preguntó Scarlet.

— Por supuesto, no usaste ese hermoso vestido solo para venir a verme a lobby— dijo Tom tomando de la mano a la chica quien lucía un vestido negro por arriba de las rodillas con algunos detalles en rojo.

— ¿Tienes algún plan?— preguntó la chica arreglando su cabello.

— Hice reservaciones para uno de los mejores restaurantes de aquí— comenzaron a caminar a la salida.

— Por eso formales—

— Por eso formales— repitió Tom.



Llegaron a un lujoso restaurante, uno de los mejores, según había leído Tom en algunas páginas de internet, en cuanto Scarlet le dijo que aceptaba ir a cenar con él se dedicó a buscar el mejor lugar de la zona, quería impresionar a la chica... Aunque claro, para ese momento no sabía que Gloria iba a declinar la invitación.

Entraron a aquel lujoso restaurante, las mesas tenían manteles pulcramente blancos y las sillas eran negras como de terciopelo, el lugar era muy amplio y su iluminación casi amarilla le daba un efecto dorado a todo, los enormes ventanales ofrecían la vista más espectacular del lugar. Tom quedó impresionado, pero a Scarlet el sitio no le causó el mismo efecto. Se sentaron en una de las mesas al rincón del lugar.

— Es hermoso el lugar— dijo Tom.

— Sí— respondió Scarlet y volteó a ver a la ventana. El mesero no tardó en llegar, Scarlet ya tenía más que claro lo qué iba a pedir, a Tom le costó un poco más de trabajo decidir pues los platillos que había investigado en internet parecía no estar en la lista.

— Supongo que no es la primera vez que visitas El Cairo— dijo Tom sirviendo en sus copas un poco de vino.

— No, ya había venido en un par de ocasiones— dijo ella y bebió un poco de agua.

— ¡Oh! Pues para mí sí es la primera vez aquí— dijo Tom jugueteando con su servilleta.

— Vine hace, ummm— se quedó pensando un rato –tres años, creo—

— ¿Tú sola?—

Scarlet rió, –no soy tan solitaria, Tom— él le sonrió. –Vine con mi amigo—

— ¿Matt?— preguntó sin pensarlo.

— Sí, con él— llegó su primer plato.

*En serio, ¿qué te traes con Matt?* fue lo que quiso preguntar Tom, pero lo que dijo fue: — Matt y tú son muy buenos amigos, ¿verdad?—

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