Capítulo 16

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Hugh Laurie y Scarlet caminaron en silencio hasta el estacionamiento de aquella locación, ella no hablaba porque estaba enfadada con su jefe, no sabía por qué le había pedido que no fuera más a las locaciones ¡y por culpa de Tom! Laurie se adelantó y le abrió la puerta de su carro. Sin decir nada él arrancó el vehículo.

— ¿A dónde vamos?—preguntó Scarlet cruzada de brazos.

— A tu hotel—respondió sin más. Se hicieron otros minutos de incomodo silencio.

— ¿Y bien? Según tú, ¿cómo incomodo a Tom?—preguntó ella.

— Tú sabes qué le hiciste—dijo Hugh y se detuvo en un semáforo en rojo.

— No sé, por eso te estoy preguntando—

— Scarlet, por favor—

— ¿Por favor, qué? ¡No tengo idea de qué demonios hablas!—se exaltó la chica.

— Cálmate, Scarlet—le pidió Hugh.

Ella respiró profundo un par de veces, sabía que no era momento de perder los estribos. — ¿Me vas a contar?—preguntó una vez más.

— Tenemos que hablar, ¿me invitas a pasar a tu habitación?—preguntó Hugh serio cuando se estacionó afuera del hotel en donde se hospedaba su asistente.

— Tú lo estás pagando, así que puedes hacer lo que quieras—se bajó y dio un portazo, Hugh le entregó las llaves al valet parking y caminó varios pasos atrás de su asistente. Ambos entraron al elevador y subieron a la habitación de la chica, sacó su llave y lo invitó a entrar él primero.

Hugh echó un rápido vistazo, le había reservado aquella lujosa habitación sin pensarlo mucho, Scarlet era su asistente y persona de confianza, nunca había tenido la menor duda de ella y su trabajo, quizá el meterse en su vida privada no era lo correcto... aunque cuando eso ya afectaba su relación laboral con uno de sus compañeros ya comenzaba a ser su problema. Se sentó en el sillón enfrente de la puerta, ella se sentó enfrente olvidando cerrar la puerta.

— ¡Ya dime, por favor!—pidió desesperada.

— Scarlet, te quiero y no creo que deba meterme en tu vida privada... Aún así lo haré porque me está afectando—se quedó en silencio y Scarlet no sabía de qué hablaba su jefe. — ¿Te gusta Tom?—preguntó.

— ¿Tom Hiddleston?—preguntó ella.

— Sí, ¿te gusta?—

— Tengo novio, prometido—respondió.

— No pregunté eso—frunció el ceño.

— ¿Por qué quieres saber?—preguntó ella desconcertada ante aquella pregunta.

— Porque tú le gustas mucho a él, está enamorado de ti—respondió y se cruzó de brazos.

Ella se quedó pensando y respondió. —Supongo que a cualquier chica que lo conozca le llega a gustar Tom, es guapo y todo un caballero—respondió ella y se quedó callada,

— ¿Y bien?—

— Si tu pregunta es sí me gusta Tom, pues sí, no estoy ciega y ha sido muy amable conmigo... pero tengo novio—

Hugh se quedó callado, pensando en lo que su asistente le estaba diciendo, ya le había confesado que le gustaba Tom, pero Matt tenía mucho que ver en que ella no le hiciera caso. –Bien, Scarlet. Ahí tiene tu respuesta, no puedes ir porque te repito, Tom está enamorado de ti—

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