El vuelo del Fénix.

Capitulo 1: Un hogar para el Fénix.

 Jamas entendió el por qué los de su raza se habían marchado, desaparecidos de la faz de la tierra dejando le a él como el ultimo Fénix, el ultimo de su clase, el más débil de todos. Lucius Mercado jamas fue el más fuerte entre sus hermanos o primos, él siempre fue el rezagado, el que todos esperaban que muriera por su debilidad o su simple torpeza; el ave de fuego de su interior era débil, había despertado mucho después que la de sus hermanos menores y su poder de regeneración era insignificante comparado con el de sus padres, tíos, primos, sobrinos o hermanos, él era una vergüenza.

 Lucius hizo todo lo posible para no avergonzar a su estirpe, entreno día y noche e incluso dedicaba cinco horas de su día para la meditación, fortaleciendo el vinculo que tenia con su Fénix para aumentar el poder de su fuego. También fortalecía su mente leyendo viejos hechizos y aprendiendo historia mágica o los nombres de distintas criaturas sobrenaturales desperdigadas por todo el mundo. Quizás no era tan fuerte como sus demás familiares, pero él tenia una mente rápida y entrenada para actuar de forma fría en los momentos más difíciles. Él se esforzó para ser reconocido, por ser aceptado en su clan como uno más de ellos y no como el pájaro débil, el eslabón frágil de su grupo. Pero no importaba cuanto se esforzara, cuanto esfuerzo y dedicación pusiera en eso, nada parecía funcionar, incluso parecía que sus ganas de ser aceptado hicieron que fuera dejado de lado, que fuera abandonado en tierra desconocida mientras sus compañeros abrían sus alas y se marchaban volando por el cielo, perdiéndose entre las nubes como fantasma dejando le a él atado a la tierra debido a la debilidad de sus frágiles extremidades.

 Lamento el momento de su partida, había sido dejado atrás como una maleta vieja, como la carga pesada que es mejor deshacerse de ella antes de que te hunda en el lodo de la desgracia.

 La migración de los Fénix fue tema de habladurías entre los seres sobrenaturales, todos hablan del hermoso espectáculo en el cielo que fue protagonizado por las aves mitológicas que danzaron en medio del fuego que ellos mismos crearon hasta que finalmente desaparecieron como las llamas de las velas al extinguirse, desapareciendo de la vista de todos mientras él solo podía observar con impotencia, su Fénix gorgojaba tristemente mientras agitaba sus alas intentando alcanzar a los demás, pero lamentablemente jamas pudo transformase completamente, lo que le impidió elevarse para seguir a su familia. Cuando callo la noche fue cuando Lucius finalmente se dio cuenta de su soledad, estaba solo y ya no tenia hogar, no tenia a nadie más que así mismo.

 No tuvo más opción que comprar una pequeña y destartalada cabaña en medio de la nada y reclamar un pequeño territorio para si mismo, nadie le molestaba porque lo Fénix eran criaturas sagradas a las que todos respetaban, ademas a Lucius no le importaba compartir su pequeño territorio con unas cuantas criaturas así que no hubo muchos problemas. Nadie preguntaba su razón de por la cual no había seguido a la migración, nadie cuestiono y tampoco nadie se acerco a ver si el hombre de cabello castaño y ojos negros necesitaba algo, cosa que de alguna forma Lucius agradeció.

 Después de todo, la soledad era su única amiga y confidente. O al menos eso fue hasta que ellos llegaron.