LETARGO

8:00 am

-pero...usted sabe que..he dado todo para mantener este trabajo
Controlé las lágrimas
-si, pero necesitamos renovar personal, lo siento, la empresa crece y necesito a alguien...mejor preparado
Dijo mientras comenzaba a hacer otras cosas.
-dejé la universidad para mantener el trabajo
Dije resignada, mirando las ampollas en mis pies por tratar llegar temprano.
-yo nunca te pedi que hicieras tal barbaridad
Si lo hizo.
-p..por favor..
-Beatriz, sal que tu reemplazo está aquí
No puedo decir nada mas, el señor había tomado la decisión y me había dejado en la calle.

Salí del edificio en medio de una crisis, en estos momentos llamaría a mis padres.
Mis crisis, desde pequeña entraba en pánico con facilidad, la taquicardia se hacía presente y el aire no entraba en mis pulmones, la vista se hacía borrosa y las ganas de llorar eran inmensa, solía esconderme detrás de mis padres, cuando me dejaron de hablar recurría a Saúl, así que le llamé.
-....
No contestaba, seguro está en el trabajo. Llamé a Alice...
"Que pasó Bea? Estoy algo ocupada"
-yo...no me siento bien..podrías
"Bea rápido que no tengo todo tu tiempo"
-no es nada...luego te digo
Colgué, ella tiene razón, la molesto con estas cosas, después será tiempo y como ella dijo, esta ocupada.
Tomé mi caja con mis respectivas cosas y me dispuse a salir, me sitúe en la parada del camión, comenzó a mojatme la lluvia tenue que caía por la mañana nublada, tomé el camión y me senté en la parte posterior.
Venía algo vacío, dado a que la hora no era tan recurrida, todos estaban trabajando o bien, estudiando.
Me recargué en la ventana, siendo arrullada por el movimiento del transporte público y con la caja sobre mis piernas.
Comencé a soñar.
Mas bien, a recordar...

Recuerdo mirarme al espejo y encontrarme con esa niña de ojos grices y tez pálida, cabello azabache recogido en dos trensas que caían sobre mi espalda, recuerdo ver que mis ojos chorreaban lágrimas casi todo el tiempo en el que me encontraba en la primaria, recuerdo el bullying, recuerdo las súplicas para poder saltarme la escuela, recuerdo la negación de mi madre por acordar que yo era una inadaptada mas, recuerdo las niñas siendo crueles, recuerdo a los niños siendo burlones, recuerdo mis rodillas rasadas, recuerdo el ardor, el dolor y la desesperación, recuerdo cuantas veces le pedí a la maestra que me ayudase, recuerdo el accidente, cuando aquella niña me empujó y quebró mi brazo donde aún queda una marca. Recuerdo aprender a esconderme, detrás de maestros, detrás de Alice y mis padres...recuerdo las inseguirdades que me persiguieron y persiguen...recuerdo todo, en días como hoy se refrescan los recuerdos y...se sienten las cicatrices mentales...las cuales por mas que trato no se cierran...recuerdo tratar de crecer, recuerdo tratar de sanar pero también recuerdo todas esas ganas de querer quitarme la...

Me despertaron de golpe.
-siento despertarla, pero no se bajaba en ninguna parada y llegamos al final de la ruta...
Era el chofer, el camión había frenado y yo, al mirar lo que me rodeaba, no reconocía ni una sola calle, ni una sola dirección.
-d..donde estamos?...
El chofer explicó amablemente, pero cada una de las ubicaciones que daba solo me confundían mas...
-y vine a llenar el tanque..
Concluyó
-y no me puede regresar? Irá por la misma ruta no?
El hombre negó con la cabeza.
-me toca cambio de ruta...pero quizá pase por algún lugar que conozca
Accedí, dado a que los alrededores de donde nos encontrabamos, aparte de ser irreconocibles para mi, se veían tétricos y peligrosos...

El camión avanzaba y yo conservaba mi postura y lugar, miraba a la gente subir y bajar del transporte, mie tras yo seguía sin reconcer las avenidas...miré mi celular..y ni una sola llamada. Saúl está trabajando y quizá Alice igual, no debo molestar. Suspiré, y me decidí a tomarlo con calma...
Me pareció reconocer un centro comercial y me levanté en seguida y con prisa.
-bajan!
Se detuvo el camión y bajé para retificar...no, me había confundido, no era el lugar que creía, el camión había seguido su curso y a demás había olvidado mis pertenencias en el camión. El pánico se apacigüo al encntrar mi celular en el bolsillo del pantalón.

Caminaba sin rumbo... tratando de sobrellevar la situación, aún con calma, a pesar....de todo..

Comencé a reconocer...poco a poco, reconocí una estación de metro, sabía que si seguía la linea de color amarillo llegaría cerca de mi casa, así que me decidí a tomarla, a pesar que este tipo de transporte se me dificultaba mucho, dado a lo concurrido que suele estar.
El pánico se apoderaba de mi y entre la muchedumbre que esperaba abordar el vagón comencé a tener la visón borrosa...sentía que el aire me faltaba y yo...me estaba desmayando.
...
Desperté en una pequeña mesa, con una compresa mojada en la frente, el cuarto era pequeño y blanco. Había alguien sentada en un escritorio quw había cerca.
-que pasó?
Pregunté desconcertada.
-oh! No se levante! Tuvo un colapso en medio de la gente y la trajimos al servicio médico del lugar, debe reposar un rato
Me sentía cansada y con el cuerpo pesado. Me hicieron quedarme un rato en el lugar y para cuando salí ya había pasado la hora pico...

Tengo hambre...
Todo el alboroto del día de hoy me había gastado suficiente energía. Debía comer algo o sufriría otri desmayo.
Ya estaba en rumbos conocidos, lejanos pero conocidos, me dispuse a comer en un pequeño restaurante cercano, algo ligero ya que al parecer me dinero estaba contado a partir de hoy..
Mientras comía pensé en mi situación actual...
-que le diré a Saúl?
Comencé a llorar, cubrí mis rostro con mis manos, se sentía patética de nuevo y el ataque de ansiedad se hacía presente. Miré el reloj y no supe cuando se me había ido todo el día, comenzaba a ponerse el ocaso...
-mierda
Suspiré y me aferraba a mi misma por todo lo que había pasado...
De pronto, comenzó a temblar.
Las alarmas sonaban pero no eran necesarias, el suelo se tambaleaba y era difícil mantenerse de pié, los vidrios tronaron y cundió el pánico. Salí a tientas del edificio que apenas si tenía daños y así como llegó, se terminó, fuerte pero corto, la gente murmuraba...lloraban y yo solo temblaba.
"El departamento"
Pensé.
Corrí hacía donde sabía que podía tomar un taxi seguro, al encontrarlo fue poco lo que avancé ya que la ciudad había estado dañada por el sismo y varias calles cerraron. Al dimensionar esta tragedia de mi día ne inundó mas el miedo por el departamento, por Saúl, por Alice...ninguno contestaban, no había señal...no tenía de otra mas qe seguir.
El desastre que se escuchaba era atemorizante, me bajé del raxi y comencé a correr a casa.
Llegué cuando el crepúsculo estaba presente.
El edificio estaba bien y por mis rumbos todo se veía tranquilo.
Si, los pies me sangraban...las ampollas habían reventado. Saúl había llegado a la casa, su auto ya estaba en su lugar... algo temprano.
Subí al departamento, encontré la puerta abierta...entré insepccionando por daños en el lugar.
-amor...
Le llamé sin respuesta, escuché ruidos de la habitación.
-amor? Todo bien?
Saúl estaba en nuestra cama
Desnudo
Con Alice...encima de él.