Capítulo IV

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Una flecha pasó justo rozando mi cara y acabó impactando en el mástil del barco, me había hecho un pequeño corte en la mejilla y sentí como un poco de sangre empezaba a salir del corte, Hvitserk me miró, se iba a acercar pero de repente empezó a salir un ejercito desde detrás de los árboles.

Empezó la lucha, sangre, gritos de guerra, el sonido del acero chocando...me encontraba parada observando la situación cuando sentí las manos de alguien sobre mis hombros, era Ubbe, me estaba agitando para que reaccionara, a lo lejos vi a padre que miraba la situación en la que me encontraba pero tuvo que seguir luchando. En seguida me di cuenta de lo que estaba pasando, vi a un hombre con la espada en la mano acercándose rapidamente hacia nosotros, me safé con rapidez del agarre de Ubbe con una especie de vuelta, acabé delante de Ubbe y clavé los cuchillos en el abdomen de aquel hombre; calló al suelo, muerto, mis manos estaban llenas de su sangre y sentí algo en mi interior que me llenó de satisfacción.

La lucha acabó, yo estaba sentada en la orilla de aquella playa limpiando mis cuchillos

- He visto como te has quedado - era mi padre, se sentó a mi lado, pero no me miró- en el fondo sabía que no debería haber dejado que vinieras.

- Solo fue un momento, luego reaccioné y..

- Podrían haberte matado! -me interrumpió alzando un poco la voz.

- Pero no pasó, papá acabo de matar a 5 hombres yo sola, sabes de lo que soy capaz, lo de antes...fue algo nuevo para mi y...

- No volverás a venir conmigo, aprovecha este viaje por que será el último, mientras yo pueda evitarlo no volverás a meterte en una lucha.

- Qué? No! No puedes hacerme esto, he estado entrenando para algo papá, no pienso quedarme en una casa lavando platos y cuidando niños, no quiero eso y lo sabes perfectamente!

- Mi decisión está tomada- se levantó y empezó a caminar bajo la atenta mirada de Ragnar que negaba con la cabeza ante lo que acababa de pasar.

- Te equivocas, ya no soy una niña, lucharé cuando y como a mi me de la gana, lo entiendes padre. - me levanté y alcé la voz para que pudiera escucharme, se dió la vuelta y me miró, no dijo nada, solo siguió su camino y se adentró en el bosque.

Pronto se hizo de noche, nos quedamos en aquella playa, hice una hoguera y monté mi tienda, estaba sentada en frente del fuego, comiendo, mi padre aún no había vuelto y estaba algo preocupada. Pasaron la horas, todos estaban dormidos y mi padre seguía sin aparecer, decidí ir a buscarlo, me levanté cogí mis cuchillos y me adentré al bosque.
Todo estaba demasiado oscuro, se escuchaban los pájaros y algún otro animal que no sabía distinguir. Escuché un pequeño chasquido, como si alguien acabara de pisar un pequeño palo

-Padre, eres tú? -nadie respondió.

Saqué mis cuchillos del bosillo y seguí avanzando.

- Vaya vaya, mira que tenemos aquí -apareció un hombre delante de mi- una pequeña vikinga eh Clark

Otro hombre apareció por detrás y me empujó a los brazos del otro. Me cogió por los brazos, yo intenté que me soltaran, pero me quitaron los cuchillos.

- Eres dura eh, eso me gusta, te llevaremos frente al rey y luego te violaremos, para que sepas lo que es un hombre de verdad y no esos estúpidos vikingos de tu sucio pueblo.

Lo último que recuerdo fue que me pusieron un saco en la cabeza y me golpearon varias veces por todo el cuerpo hasta que quedé inconsciente y...

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⏰ Última actualización: Mar 10, 2019 ⏰

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