Señor Malik •Zerrie•

Capítulo 40

Lo esquivé toda la tarde, hasta que me fui al departamento. Al llegar me di un baño para relajarme. ¿Cómo es posible que esté aquí? ?por qué está aquí? ¿Por qué debe ser el socio de mi proyecto con Harry?

Enciendo la televisión intentando despejar mi mente, pero todo intento es fallido. La mente me hace una mala jugada viajando al pasado y al presente.

Recuerdo su cara al verme tomada de la mano con Niall, ¿le habrán dado celos? ¡Que importa!

Los pensamientos son interrumpidos por el timbre. No espero a nadie, ¿Quién será? Pienso en Niall, el siempre viene, así que abro la puerta y hablo.

-Nos acabamos de ver Niall, ¿que haces..?- No termino de hablar porque me quedo paralizada.

-Hola.- Dice simple.

-¿Que haces aquí?- Pronuncio y el me sonríe.

-Necesito que hablemos.-

-Pues yo no lo necesito, así que por favor..- Intento cerrar la puerta, pero si mano me lo impide. -Zayn por favor vete.- Digo.

El niega, camina hacia mi cerrando la puerta tras el. Ya que, ¿no?

Camino hacia mi sala y me siento.

-Lindo.- Dice refiriéndose al departamento.

-No creo que hayas venido hasta acá para decirme eso. ¿Qué quieres y cómo conseguiste mi dirección?-

-Ahora trabajamos juntos, ¿Quién lo diría no?- Sonríe. -Lo he buscado en tus papeles.- Corro mis ojos. -No se te ha quitado esa costumbre.- Dice refiriéndose a mi corrida de ojos.

-¿A que viene todo esto?- Pregunto cansada. -Dime la verdad, ¿a que viniste a Madrid?-

El me mira y yo a él. ¿Por qué sigue provocando estas estúpidas de sensaciones en mi?

-Vine a hacer negocios.- Dice sentándose frente a mi. -Pero nunca pensé que terminaríamos siendo socios. ¿Quién diría que de sirvienta serías esto que eres ahora?-

-Así es, pero no te creo.- Digo y el ríe. -Las cosas para mi cambiaron muchísimo.- Digo y el asiente.

-¿Estás saliendo con el ken?- Frunzo el ceño.

-¿Quién es el?-

-Con el rubio, Horan.- Río un poco.

-No te interesa.- Digo.

-Si me interesa. Los vi muy juntos hoy.- Pronuncia celoso.

-No te queda el papel de celoso.- Bufo.

Cuando nuestras miradas vuelven a encontrarse corto el momento colocándome de pie. El me sigue y sonríe.

-¿Estás nerviosa?- Pregunta sonriente.

-No.- Digo.

Obvio que lo estoy.

-No te creo, tu mirada dice lo contrario.-

-Ya Zayn, mejor vete.- Le pido, pero el niega.

-Tenemos muchísimas cosas de que hablar.-

-No me interesan, lo que sucedió entre nosotros quedó en el pasado. Yo ya no quiero regresar a eso, hace mucho pasé la página.-

Veo a Zayn alejarse y murmurar algo. Se acerca a mi y me mira.

-Pues no parece.- Dice. -Te has puesto muy nerviosa al verme, ahora mismo lo estás, me sigues queriendo lo sé.-

-Estás muy mal.- Lo miro. -Yo ya no te quiero.-

Al parecer eso le dolió porque se sentó en el sillón ocultando su rostro entre las manos. Estuve a punto de ir a consolarlo, pero no, el me ha hecho mucho daño.

-Entonces no sientes nada por mi.- Dice después de unos minutos.

-Igual que tú.- Lo ataco. -¿Recuerdas aquella llamada?- Le pregunto dolida. -Lo de nosotros fue muy patético Perrie, nunca me he enamorado, menos lo iba a ser de ti. No te amo, ¿has entendido? No me busques más.- Pronuncio esas palabras que tanto me marcaron, porque todo eso me lastimó y aún lo hace. -¿Lo recuerdas? Por qué eso me dolió muchísimo, lloré toda la puta noche. ¿Cómo le hiciste? Horas antes habías dicho que me amabas, ¿por qué?-

No se en que momento las lágrimas comenzaban a bajar. Lo veo acercarse a mi y abrazarme con mucha fuerza. Su rostro se esconde en mi cuello y mis manos viajan a su espalda.

-Perdóname.-

-No.- Digo. -Me lastimaste de la peor manera.- Me alejo de el y al instante siento un vacío enorme.

-Perrie, todo tiene una explicación.- Me dice. -Yo si me enamoré de ti y es más que claro que si te amo. ¿Qué no lo notas?-