Desperté y corrí hacia mi escritorio. Hice un pequeño dibujo, que consistía en un cielo con estrellas. Como esa noche en la que conocí a Simon, pensé sonriendo. Tomé una corta ducha y me coloqué en ropa sencilla.
Pensé rápidamente en que debía hacer. Hice varios dibujos, pensando en mi mejor amigo. Sabía que Simon estaría con su novia, y yo estaría allí, un poco mal porque él me gustaba.
Tomé mi celular, que no era ni el mejor, ni el peor, y revisé si mi mejor amigo me había mandado un mensaje.
Simon: Dormilona, despierta, te debo llevar a la escuela.
Usted: Ya estoy despierta, tontuelo. Te espero.
Rápidamente, me coloqué en mis zapatillas y con cuidado até los cordones de ésta. Colgué mi mochila y bajé con ésta sobre mis hombros. Dejé un beso en la mejilla de mis padres y salí de mi casa para esperar a Simon.
Usted: ¿Qué nunca llegas? Simon querido, apúrale que me desespero.
Envié el mensaje, soltando unas cuantas carcajadas. Caminé hacia el borde de la esquina y esperé pacientemente a mi mejor amigo.
-Aquí estoy, señorita -se burló Simon, con una sonrisa.
-Vale, señorito, la verdad diría que es un placer verlo pero... mentiría -murmuré con una sonrisita divertida.
-Claire, estás rara -sonrió burlón, haciéndome entrar de golpe en el auto-. Ya deberías dejar de ver esos programas tontos -estalló en carcajadas, refiriéndose a cómo veía esos programas... "Friends", "The big bang theory", "Teen Wolf" y más de un millón que veía. Golpeé su hombro amistosamente, manteniendo mi aire de formalidad, el cual rompí unos minutos después.
-Vale, idiota. Pero tú deberías dejar de ver a Jane y Adam, te ponen más loco de lo que eres -reí un poco, mientras mi amigo fruncía el ceño-. ¿Y qué hice ahora? ¿Otra cosa mal, como cada vez que nombro a esos dos estúpidos, que no hacen más que fingir ser tus amigos? -inquirí.
-Sabes, esto termina aquí. Vete ya de mi auto -señaló, echándome del auto.
-Vale -asentí, saliendo del auto. Tuve que caminar más de catorce cuadras, sola, en el medio de la nada, en una mañana fría, hacia la escuela. Qué idiota que era mi amigo.
Luego de unos cuantos minutos, vi la escuela. Caminé hacia la escuela, sabiendo que iba a golpear al estúpido de Simon.
-Simon -chillé, ya en la escuela, muerta de frío y enojada, demasiado enojada. El chico ni se inmutó en voltearse. Claro, estaba con Jane, su estúpida novia. Mientras yo caía por él, él por ella y ella por él. Menudo desastre, ¿verdad?
-¿Qué? -preguntó él, volteando. Me miró haciendo una mueca, como si no importara. Me hizo unas señas y se retiró.
No, no y no. ¿Por qué siempre me pasaba esto? Un rato después, la canción de Demi Lovato "Fire Starter" resonó en mi bolsillo.
Tomé mi celular y leí el mensaje.
Simon: ¿Sabes? Lo lamento Claire, de verdad. Te quiero amiga, pero sabes que debo estar con mi novia. Hablamos después de clases, ¿vale?
Tragué duro. Es verdad, novia. Solo porque yo no podía ser nada de él. Yo caía por él, desde ese día... gracias a aquellas estrellas. Pero él no lo sabía. No lo sabía y jamás lo sabría.
Usted: Ajá, vale.
Mandé el mensaje, clavándole el típico visto. Metí mis manos en los bolsillos de mi chaqueta y caminé hacia la clase de Literatura avanzada. Sí, Literatura avanzada, tal y como escucharon. Mi cronograma de la secundaria se basaba todo en Artes. Esa era la carrera que había elegido, como no.
La escuela pasó demasiado rápido. Presté atención en la mayoría de las clases, menos en Física, ya que la compartía con Simon. El muy descarado no me hablo ni miro. No sé que hice para que se juntara con esos dos tontos. Y lo que menos sé, es porque se junto con Jane.
Tomé mi celular y le tecleé unas cuantas palabras a Simon.
Usted: Simon, gracias por mirarme o hablarme. La verdad, que no se si estás enojado conmigo o me quieres. Gracias por demostrar tanto tus sentimientos. {es sarcasmo, ¿sabes?}.
Simon: Cállate, sunshine. Paso por ti en... tres... dos... uno... llegaré en un rato.
Usted: Vale, te espero. Por cierto, cambiaré tu sobrenombre.
Simon: ¿Lo harás? ¿Cómo me dirás?
Usted: Demostrador de sentimientos. {creo que aún notas la irónia}.
-¿Me dirás así? ¿De verdad?
-Era una broma, tonto -mascullé obvia.
-Vale, vamos al auto -puso una cara rara, a lo que sonreí.
El camino transcurrió en música y sus charlas divertidas conmigo. Su novia jamás estuvo presente en la charla, lo cual me hizo feliz.
Pero, de más esta decir que comenzó una charla sobre su novia. La perfecta y más hermosa, y bla, bla, bla, Jane Forest. De verdad, ¿a quién le podría gustar aquella rubia de ojos avellana que su personalidad era más fría que una noche de invierno sin estufa? ¿O qué su personalidad era la más lambiscona de todo el mundo? ¿Y qué su alma era más malvada que los patos? De verdad, no lo sé. Pero creo que tenemos la respuesta... redoble de tambores por favor... ¡Simon Harries! Y no, no miento. A mi mejor amigo le gustaba esa chica, la chica que peor me caía en todo el universo. Sí, peor que cualquier otra persona, ella era mi enemiga, la persona que más odiaba. Me estaba intentando de quitar a MI mejor amigo, el cual me gustaba, pero ese es otro tema.
Suspiré cuando el nombró a su novia y no le presté atención durante toda la larga charla.
-Al final... hey, ¿me has escuchado?
-¿Qué? Eh... sí. Oh lo lamento, me bajo aquí -grité, tomando mi mochila y saliendo del auto de mi mejor amigo.
Bajé del auto y me encaminé a mi casa, que estaba en frente de donde Simon había estacionado. Saludé a mi madre y fui a mi cuarto. Saqué mis deberes y los hice. Luego de eso, hice mi deber de fotografía: sacarle unas cuantas fotos al atardecer. Como saben, debían ser perfectas, porque venía estudiando eso desde séptimo grado. No sé si lucían perfectas, pero no solo estaba conforme con las fotos, me parecían más que perfectas. O al menos eso pensaba.
Luego de eso, tomé una corta ducha, me coloqué en mi pijama, y como toda persona normal, hice mis necesidades.
Tomé mi celular y hablé unas cuantas horas con Simon, y con unas cuantas, me refiero a que me quedé hablando hasta las cuatro de la madrugada. Claro, hice algunos intervalos, como comer, ir al baño y bla, bla, bla.
N/A: La foto en multimedia es una frase que dice Claire en una parte de la historia, presten atención y se darán cuenta. ¡Gracias por leer, espero que les haya gustado! <3
