—Señor Richard Camacho ¿Acepta a el señor Christopher Vélez como su esposo, para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe? —Pregunto el cura.
—Acepto. —respondió el moreno con una deslumbrante sonrisa.
—Señor Christopher Vélez ¿Acepta a el señor Richard Camacho como su esposo, para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe?
El castaño sólo bajo la cabeza con las mejillas completamente sonrojadas.
Y sonrió al ver sus manos entrelazadas.
Esto era lo que más había deseado y ahora se estaba haciendo realidad.
—Acepto.
—Que lo que Dios unió, no lo separe el hombre, pueden besarse.
Richard se acercó a el y paso sus brazos por su cintura atrayéndolo hacia el.
—Te juro que pensé que dirías que no.
El ojimiel sólo rió y unió sus labios.
*Tiempo después*
—¡Papis! —Gritaron los pequeños corriendo hacía sus padres.
—Hola mis amores —Saludo el moreno y sin dudarlo la pequeña Aaliyah salto a sus brazos.
—Los extrañé —Susurro la pequeña escondiendo su cabeza en el cuello de Richard.
—¿Y para mi no hay abrazo? —Pregunto Christopher con los brazos abiertos y los dos pequeños le saltaron encima abrazándolo también.
El pequeño Alex tenía 5 años, lo habían adoptado en un orfanato 2 años después de haberse casado.
Al recorrer el orfanato, divisaron a un niño de tez blanca y cabello castaño, que ciertamente tenía demasiado parecido con Chris.
El niño tenía un pequeño moretón cerca de los labios, que llamó bastante la atención de la pareja.
Al preguntarle el pequeño respondió que lo habían golpeado unos niños de 12 años, porque estaba mirando a un niño que le parecía lindo.
"Ellos me dijeron que era un enfermo y que nadie me querría adoptar"
Christopher nunca se olvidaría de esas palabras, había pasado por lo mismo sólo que a una edad mayor.
"Es el." Pensaron al instante de haberle hablado.
Ese mismo día se lo llevaron a casa.
El niño era feliz y también los hacia feliz.
En cuanto a Aaliyah, Richard apenas se divorció de Jocelyn, comenzó una demanda por la custodia de la niña.
Demanda que ganó justamente, sin juegos sucios, ni dinero de más de por medio.
La pequeña iba a visitar a su madre cada vez que ella quisiera.
—Siempre me imaginé esto ¿sabes? —Confesó el moreno mientras observaban a los niños jugar en el patio.
—¿Que? —Se hizo del desentendido, sabía perfectamente de que hablaba porque de cierta forma ese también había sido su sueño.
Y ahora era realidad.
—Tu y yo, formando una familia —Paso sus brazos por la cintura del ojimiel —Una hermosa familia contigo.
—¿Si?
—Si, y era horrible despertar y ver que había sido un sueño.
—Pues ese sueño ahora es realidad.
El moreno sonrió.
—Hasta que la muerte nos separe.
Citó las palabras del cura y se acercó más al castaño para cortar la poca distancia que había.
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La Vida Sin Ti ||Oreo
FanfictionNo hay nada más difícil que la vida sin ti... Inspirado en la canción de Piso 21. ✴Oreo {Ristopher}