La muerte Acecha

Capítulo 5

Dejé de escucharlos...

Escuché un auto por afuera pero no a ellos, vi que la ventana estaba rota entonces por ahí me salté.

Vi un auto rojo y a unos hombres cargando a Michell y Thomas dormidos, tomé una piedra y le lancé  al auto. Recibí un golpe en la cabeza.

...

- ¡Ay me duele la cabeza!, ¡dónde estoy!, ¡qué paso!. - Me preguntaba. - ¡Thomas!, ¡Mitchell!, ¡dónde están!.

- Hola. -Dijieron desde lejos.

Me iba a parar pero me di cuenta de que estaba amarrado a una silla. Me pusé a forzajear pero me era inútil.

La silueta de un hombre apareció en la pared.

- ¿Quién eres?. - Pregunté.

- Un viejo amigo. - Respondió.

- ¿Dónde están Thomas y Mitchell?

La luz se encendió, donde dejaba ver a Michell y Thomas dormidos y amarrados a una silla.

El tomó un balde de agua y les lanzó para que se levantaran. Rápido ambos reaccionaron.

- ¡Qué pasa!, Oh no, ¡ayuda!. - Gritaba Mitchell al verse y vernos amarrados.

A Thomas se lo veía confundido.

El hombre acercó las silla de mis amigos a la mía, ahora los tres estábamos más cerca, el hombre se fue.

Después de un rato el apareció pero no solo, él estaba con alguien más... los dos estaban armados. Me moría del miedo, no sabía qué hacer.

Diablos, ahorita fuera bueno tener un cuchillo para cortar la cuerda como en las películas pero no estamos en una, estúpidas películas.

Esos dos se acercaban a nosotros, yo estaba aterrado pero no lo demostraba, Michell no dejaba de llorar y Thomas estaba confundido aún.

El que recién vino recargó su pistola.

- No llores, no te va a pasar nada, bueno si nos obedeces. - Mencionó el otro.

- ¡Ayuda!. - Gritó más fuerte Mitchell.

- ¡Cállate!. - Dijo dándole una bofetada.  

Narra Thomas.

A pesar de no entender lo que pasaba me di cuenta lo de Mitchell.

- ¡No te atreves a golpearla de nuevo!. - Le grité al tipo que la bofeteo.

- No te metas, vas a estar bien si cumples con la misión. - Mencionó él.

- ¿Qué misión?.

El rápido soltó una carcajada.

- Debes asesinar a Joel, mañana lo ibas acompañas a matar a Fernanda, ¿verdad?. Pues quiero que lo asesines.

- No lo haré. - Dije negándome.

El otro le susurró algo en el oído, por una extraña razón ambos se rieron.

Entonces apuntó a Luis con la pistola y le disparó en la frente.

- Si no lo haces, tu amiga será la siguiente. - Mencionó el que disparó, ósea el recién llegado.

Fue tan horrible ver el asesinato de Luis, como el de Fabián o peor. Tenia sangre resbalando de su frente.

- ¿Ahora esta más claro lo que debes hacer?.

Me acordé que a Joel lo conocí hace 2 años y además no eramos tan unidos, pero con Michell es distinto, a ella la conozco desde primer grado, ella es mi confidente ella es mi caja fuerte, ella es mi mejor amiga y no debo permitir que nadie le haga daño.