CUANDO CAE LA NOCHE -CLEXA-

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La noticia de que alguien fue asesinado anoche, estalló en el campus. La policía continuaban investigando la escena del crimen sin embargo, sospechaban que se trataba de un robo y culminaba en homicidio.

La víctima era un jugador alcohólico conocido. Tenía muchas deudas y se corría la voz, de se había acercado a varias alumnas por las noches, generalmente cuando estaba borracho. Ninguna de sus víctimas lo había denunciado a la policía ya que la agresión se resumía a palabras obscenas contra ellas.

De todas formas, Lexa se sintió orgullosa de haber matado a un hombre de su clase.

Madi, sabía que Lexa normalmente se quedaba despierta en el laboratorio, y le había pedido que no volviera a casa por tan noche para evitar tales cosas. Lexa había dicho que sí, aunque no planea seguir la petición de Madi.

Para tranquilizar el corazón de su amiga, Lexa la invito a comer el almuerzo y un helado.

Se olvidó a propósito, de contarle a la chica que el dinero que utilizó para comprar sus alimentos, era del muerto.

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Las siguientes semanas, Lexa hacia malabares entre la escuela, Madi y la profesora Griffin. Cuando no estaba demasiado ocupada con sus tareas, se mantenía como una buena amiga para Madi, y otras veces acecha a la mujer mayor.

Una mañana, Lexa se encontraba a un lado de la carretera, justo afuera de la cafetería favorita de la profesora Griffin. Solo esperando por ver a la mujer mayor, ordenar su bebida. Otros días, Lexa la esperará pacientemente mientras la profesora Griffin cumplía con su rutina semanal por la mañana; corriendo alrededor del parque de la universidad.

Y raros días, Lexa miraba a la Profesora Griffin y al Profesor Blake teniendo sus momentos íntimos en su oficina, o en otros lugares, ya fuera en el apartamento de la Profesora Griffin o en el del Profesor Blake.

Le enojaba en dé sobre manera, cada vez que veía al profesor Blake tocar a la Profesora Griffin por todas partes, sin embargo, algo acerca de la mujer mayor la hacía querer ser testigo de los grotescos y desagradables momentos.

A veces tenía que luchar contra la fuerte necesidad de lastimar al hombre.

A veces, se obliga a sí misma a recordar, el sonido gorgoreante, de la sangre brotando del tipo que asesino, para evitar romperse ella misma.

A pesar de todo eso, no podía negar la emoción de acechar a su presa.

Lexa encontraba poder y una inmensa satisfacción al aprender cosas nuevas sobre la Profesora Griffin, los pequeños hábitos, el lenguaje corporal, las cosas favoritos, los disgustos y demás cosas, la lista es interminable.

Poco a poco, Lexa reunió toda la información y la almaceno de forma segura, en el fondo de su mente, para un futuro uso.