Capítulo 12.

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Hola, bueno quería deciros que este capítulo tienen una escena un poquito subida de tono, sino la queréis leer pasar al siguiente capítulo. Ya sabéis, comentar y votar. Un beso.

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Punto de vista de Marta.

Llegamos al portal de mi edificio, y claro del de Harry, Niall y yo llevábamos a Harry como podíamos y el iba gritando estupideces por ahí, la verdad, me reí mucho con lo que decía.

Entramos a casa de Harry y lo dejamos en la cama:

-Harry,duerme te por favor- Le dijo Niall serio.

-¿Que voy a hacer si no?Mira que eres tonto- Le contestó Harry- Anda dejar me en paz que tengo sueño, adiós- volvió a decir Harry apagando la luz de su habitación.

- Niall deja lo, vamos- Le dije yo, yo tenía experiencia en cuanto a borrachos, no por mi, si no por que mis amigas habían cogido cada borrachera...

Salimos de casa de Harry y entramos a la mía, Niall se acerco a mi y me dijo al oído susurrando me:

-Siento lo de Harry, esta mal.

- Lo sé, me ha contado lo de  la Rose esa...- Le dije yo también susurrando.

- Olvidemos eso, ahora estamos tu y yo.- Me dijo Niall al odio provocando me

Sus labios se acercaron a los mios y se unieron, pasé mis brazos por detrás de su cuello y le alborote  el pelo, y el poso sus manos en mi espalda.

Entre beso y beso le fui conduciendo hasta mi habitación donde caímos en mi cama, el se quito su polo y me sacó la blusa que yo llevaba, dejando me en sujetador, luego poso sus dedos en el botón de su pantalón para que yo se los desabrochara y así hice, sus pantalones bajaron dejando lo en boxers, el hizo lo mismo con mi pantalón, me desabrocho el sujetador y me acosté encima de el, besando cada parte de su pecho y el besando mí cuello, provocando me cada vez más y más. Tiré de sus boxers y los deje caer al suelo, dejando lo completamente desnudo y el hizo lo propio con mis braguitas, quedando me yo también desnuda, ahora el fue quien se posó encima mía, besando me y mordiendo el cuello, se levanto y saco de su cartera un paquetito gris, me pregunto con la mirada y yo asenti, ví como se ponía el preservativo y vino hacía mí, se volvió a posar sobre mi y hicimos lo propio de la situación,gemí hasta no poder más, entonces  nuestros cuerpos se separaron, teníamos los dos la respiración agitada, el me abrazó y me quede durmiendo en sus brazos.

¿En Londres solo hay tíos buenos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora