Cuando cae la noche.

La gemela.

En un sistema hay muchas posibilidades tantas como seas capaz de vislumbrar.... Todo se vuelve una posibilidad si la miras con claridad.
Incluso aquellas imposibles o absurdas tienen una probabilidad de volverse tangibles con tan solo rozarlas.

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Fue a mitad de un viaje que itachi uchiha por fin se sincero con kisame.
-aquella chica la de la foto, fue mi primer amor.
Era de noche, el viento mecía las olas que a lo lejos se veían realmente oscuras. Sonaban con fuerza y las túnicas se levantaban con suavidad.
La marea había subido pero aún se podía caminar sobre la playa.
- es realmente bonita - dijo kisame observando la fogata que él uchiha recién encendía.
-la fogata?
-la chica, tu chica?
-ah ya... Si, lo es...
-te dejo?
-no, la mate.
Aquellas palabras habían desconcertado tanto a kisame que no supo que decir.
Itachi uchiha definitivamente estaba loco no entendía porque pensaba en alguien que el mismo había matado.
Y mucho menos entendía a que se refería con querer "encontrarle", eso era algo absolutamente absurdo, el mismo había apagado la luz de sus ojos, como diablos pretendía encontrarla?, no tenía sentido. Solo tres metros bajo tierra, eso era lo único que podría tener coherencia en todo el asunto.
-esta muerta? Como piensas encontrarla, si esta muerta? Si tú la mataste...tu estas demente...
Kisame guardó silencio un par de minutos y medito seriamente lo que itachi decía.
-no necesitas entenderlo.
El fuego encendido reflejaba en los fríos ojos del uchiha.
Por qué itachi uchiha había matado aquella chica? Al parecer esa situación se había convertido en un trama muy particular, podía ver claramente como le afectaba demasiado el asunto de "izumi".
Quiso preguntar del porque estaba muerta, pero no lo hizo. Seguramente había tenido una razón de peso.
El mundo ninja, es un mundo cruel donde las razones tienen más peso que la misma vida.
-hay algo que no entiendo... Como puedes estarla buscando, bastardo loco!, eso es debes estar completamente loco, a menos que vayas al otro mundo por ella.
-lo consideraré cuando llegue el momento de mi muerte.
-vaya que eres egocéntrico, crees que está esperándote?
-si supongo, eso espero.
El fuego había calentado sus cuerpos. Kisame pensó  que hacía falta algo de cerveza o una trucha que asar.
Y como si le hubiese leído la mente, sacó un par de latas de la mochila negra que llevaba consigo.
-la idea que tengo...
-cerveza, que bien- dijo kisame entusiasmado tomando la lata que itachi le extendía.
-...esta idea no es tan descabellada como parece,- continuó itachi con la lata en la mano -has oído hablar del douple jenger? - kisame tenía la cara de no entende de que estaba hablando itachi - alguien idéntico a ti en el mundo. Alguien que es completamente igual a ti.
-completamente igual?
-si, la cascara, debe haberlo. Alguien que podría fácilmente confundirse contigo sin ser tu hermano... En pocas palabras tu doble.
-bueno si. Si He visto personas cuyo parecido es asombroso aún y cuando no tengan parentesco.
-Fácilmente a una distancia considerable tengo la teoría de que podrías encontrar a alguien con tus mismas características fisiológicas.
-ja... Me gustaría ver algo como eso.
-a mí igual.
Tal vez solo se trataba de ver por última vez a "esa persona"
-supongo que solo es un sueño- dijo agitando su bebida para dar un buen trago.
-hay cosas que no se pueden deshacer.
Había nostalgia en las palabras de itachi. Demasiada. Si lo pensaba bien itachi siempre lucia incompleto.
- Talvez tenga una hermana (?)- bromeo kisame.
-idiota.
-para mí la hermana.... jajaja. -luego de pensar con seriedad añidio -Así que parte de la misión es encontrar a ... (Refiriéndose a la chica "idéntica" de izumi)
-bueno no es una misión. No es la gran cosa.
-te entiendo...
-Cruzando el mar- comentó itachi -hay una isla llamada cielo, nunca he estado allí. Dicen que es un paraíso.
-imagino, debe ser una isla bonita, con paisajes asombrosos.
-le llaman el cielo porque las mujeres de aquel lugar son las más hermosas.
-de verdad?- preguntó kisame entusiasmado -Vaya que me gustaría ir.
-cruzaremos en el amanecer y después quién sabe.
Era de esperar que kisame se apuntara a la aventura con semejante promesa.
Y mientras la noche avanzaba y la luna descendía de la parte más alta, en el cielo una ave de papel apareció repentinamente.
-es una carta de konan.
La carta decía algo como esto; "necesito que se dirijan a la aldea del trueno. Hay un paquete que quiero que traigan a salvo".
-qué fastidio- dijo itachi restando importancia al asunto -supongo que puedo dejártelo a ti.
-realmente quería ir al "cielo"... Qué remedio- añadió kisame con resignación doblando la carta.
-mmm... De cualquier forma podrás entrar "al cielo" si haces una buena misión.
-ja, entrar al cielo? esas piernas no se abrirán tan fácilmente.
-eso es cierto, si piensas que no lo harán, es porque así será. Para abrirlas debes abrirlas primero desde tu mente.
-no voy a responder a eso.
-marica.
-no escucho...