En momentos como este es que debería tener un gran abrigo cubriendo y calentando mi cuerpecito debido a que en las mañanas hace un frío abrazador, pero adivinen a quien se le quedó la chaqueta, si, por supuesto, a mi, así que en estos momentos muero de frío, y probablemente muera de hipotermia al estar aquí esperando a ese escuincle de Sunghae abra la puerta
He estado afuera como por cinco minutos y aun así no abre la maldita puerta. Llevo mis nudillos nuevamente a la puerta y los choco contra ella generando un sonido seco, me frotó los brazos cubiertos por la tela fina del suéter.
Escucho unos pasos aproximarse por lo que me echo hacia atrás, la puerta finalmente se abre revelando a un Sunghae totalmente adormilado.
—¿Mack? —habla con una voz un tanto rasposa y ronca, se rasca la nuca confundido.
—Mack mi abuela Lee Sunghae, me puedes decir porque carajos no estas listo.
—¿Listo para que?
—Como que listo para que joder, la universidad Sunghae.
Y allí abre desmesuradamente sus ojos, ah, ahora si te desperté verdad. Miro mi reloj y marcan las 06:23hrs, mi vista se posa nuevamente en él.
—¡¿A que mierdas esperas?! ¿A mi abuela en tanga? —hace una mueca horrorizado —No, ¿verdad?, pues ve y cámbiate rápido.
Sale disparatado escaleras arriba directo a su habitación, me quito los zapatos y los dejo en la entrada para así ingresar en la pieza principal —rara costumbre de asiáticos —, me encono de hombros y mis ojos recaen en el perchero de al lado y sin pensarlo ni un momento, tomo una chaqueta, obviamente una de mi mejor amigo, la paso alrededor de mis brazos, calentita; justo lo que necesitaba, una temperatura agradable para mi cuerpo.
Escucho a ese sujeto bajar por las escaleras, de inmediato llega un olor muy conocido para mí, su perfume, las atrae nenas como él lo llama.
—¿Lista?
—No lo sé, tú dime —lo miro de manera obvia, el solo muestra una sonrisa como muestra de disculpa.
—Let's go baby
Me río a carcajadas, bien, ese fue un fatal intento de inglés.
(. . .)
La verdad es que mi vida no es muy interesante en la universidad, o no hay algo que la haga interesante, si, es muy triste, lo bueno es que tengo a un mejor amigo a mi lado que con sus estupideces me alegra las mañanas de monótonas y aburridas clases, aunque en algunas ocasiones vaya a darse unos buenos besotes con cualquier chica que le coquetea, claro, siempre que esa chica sea atractiva, me acuerdo de una vez que una chica que no era como las demás, era algo mas recatada, tenia ese toque de inocencia, usaba lentes y unas adorables pecas adornaban sus mejillas, era tachada como una cerebrito por lo que cuando ella se le confesó a Sunghae el solo la ignoró, es que claro como no era una de esas putas que el besaba la rechazó de una horrible manera, obviamente se llevó unos buenos golpes de mi parte luego de eso, a veces, bueno la mayoría de veces es un idiota, y acción sin pensar, Harumi quedó muy mal después de eso, y de verdad que la entiendo, fue horrible.
Las clases pasan rápidamente, escuchar al profesor de psicología es algo que me encanta por lo que el tiempo se pasó rápido, cuando salgo de mi facultad veo a Noe salir del suyo, por lo que alzo la mano para que me vea, cosa que se me dificulta por el tumulto de estudiantes, así que como segunda opción grito su nombre haciendo que voltee justo a mi dirección y se acerque.
—Hasta que por fin se te ve la cara Mack.
—Que yo sepa eres tú la que no ha se reportado desde esa vez en la cafetería.
ESTÁS LEYENDO
K I M [EDITANDO]
Teen FictionMirarte a los ojos eran unos de mis pasatiempos favoritos a pesar de no verlos siempre, a pesar de no poder sostener tu mirada. Me gustaba oír tu voz. Cuando me contabas sobre lo que habias hecho durante el día y como estabas, las veces que me decía...