Fate Or Coincidence? (Camren G!p)

Capítulo 4

Pov Camila.

Llegue a la clínica a las 9 de la mañana, firme una hoja donde pedían mis datos y espere a que llegara mi turno. Mi doctor de cabecera era Scott un señor de 35 años, tenia unos ojos celestes muy lindos, su pelo era castaño y con algunos rulos, era muy amable conmigo, creo que le daba lástima, ya que siempre venia sola, excepto esa vez que vine con mamá y pidió las píldoras anticonceptivas, el solo sonrió con comprensión.

— Camila cariño, puedes pasar — me dijo el doctor cuando abrió la puerta y dejo salir a la señora que estaba atendiendo.

— muchas gracias doctor, tenga un buen día — le dijo la señora y medio lo abrazo.

— muchas gracias Gertrudis, e igualmente para ti — le dijo amable el doctor y ella se fue.

— entremos cariño— me dijo y cuando entre en su consultorio, él cerro la puerta — bueno Karlita, te me habías perdido eh, te espere la semana pasada y nunca llegaste, hasta pensé que te había pasado algo ya que siempre estas a tiempo con tus chequeos — me dijo un poco serio.

— lo siento doc, tuve tantas cosas en mente que se me olvido completamente, pero aquí estoy— le dije sonriendo.

— bien Mila, lo importante es a que  ahora ya estas aquí — me dijo sonriendo.

— si y en realidad me he sentido mal estos últimos días — le dije y él me observo como diciendo "sigue" — me han dado mareos, ganas de vomitar, me pongo pálida de la nada, a veces no tengo ganas de comer, en otras ocasiones como demasiado y me he sentido como decaída, con sueño, — le dije. Él se quedo unos segundos sin hablar, solo anoto algo en una hojita.

— Bien Mila, te harás estos exámenes en el laboratorio, son de sangre, orina y heces, estos dos últimos son para descartar infecciones, los síntomas que me has dicho son muy parecidos a la anemia ferropénica, es una anemia que da por falta de hierro, para esto es el examen de sangre — ok lo del examen de heces me dio pena. —  te los entregaran en dos horas, una vez que los tengas debes de venir a que te los lea y asíver que tienes y recetarte lo que vas a tomar— me dijo dulcemente.