Jhosuga The Half Dragon:Origen

Capitulo 4: La Buena Comida.

Sale un nuevo amanecer en este planeta mientras alba está saliendo para deslumbrar y despertar a Alejandro y Oriana de sus sueños profundos, el viento sopla delicadamente, las nubes las cuales tenían un color gris, que daba entender que podía llover, en un fuerte soplido que hace el viento se lleva que varias hojas extrañas que lentamente, llegan a la ventana de Oriana.

Ella entre dormida y despierta se levanta, arrugando fuertemente los ojos, por el sol que le daba en la cara, dicen que no hay sol más brillante, que el de la mañana pero, al ver que la habían despertado dos simples hojas, cerró la ventana automática, fugazmente y se devuelve a su sueño.

Pasa una hora completa y Oriana decide levantarse de su cama, al abrir de nuevo la ventana automática, se encuentra con la sorpresa, de que está lloviendo muy intenso.

-Está lloviendo demasiado –Dijo muy espelucada la bella durmiente-

Se quedó mirando un rato la ventana, pero logro percatarse de algo que hay una especie de animal, con una forma peculiar, muy parecida a un ciervo, aunque este parecía que sus astas, parecían remolinos o taladros hacia arriba.

Pero eso no era lo único extraño, también parecía que su pelaje se iba cambiando con el barro, que se formaba en el suelo pero no por la suciedad, sino porque el pequeño animalito su pelaje parecía cambiar de color se podía camuflar con sus entorno, en ese instante corrió por su cámara, su laptop y el mando holográfico, para tomar la forma de la criatura.

Pase unos pocos minutos, pero al momento que la criatura se dio cuenta que lo observaba dio saltos muy grandes, al ver ella pensó de nuevo en la energía que este planeta podría brindarle a las cosas de aquí, pero le gano más la molestia de no terminar los datos del animal, así que se puso mal y comenzó, a revolverse en la cama haciendo pucheros a la nada.

-Maldición por qué no se quedó quieto, no sé, quizá todo el día para estudiarlo mejor.

Se revolvía en la cama aunque, paso su frustración y se levantó a cepillarse, después de cepillarse bostezo mucho, así que vistió si cama pero se cae una almohada, debajo de la cama, al recogerla se golpeó sin querer, con la esquina de la cama y su desenfrenado su grito de dolor, sale:

–Aaaaaaayyyy uuuyyy eso dolió –Le salían pequeñas lagrimas-Mejor voy a despertar a Alejandro ese siempre se la pasa durmiendo-.

Se saca la pijama blanca y saca un mono y una camisa gris, de entrenamiento y paseo por la gran nave, antes de despertar a Alejandro, mientras que él.

Abrí mis ojos y se veo que esta vestido, con un esmoquin negro con corbata, miro a su alrededor un montón de gente desconocida, vestida como yo completamente de negro.

-¿Dónde estoy y quien es toda esta gente?

Le toco el hombro a lo que parece ser una señora, la cual resulta no tener ojos.

-Aaaahhh –Cayo de nalgas al suelo, se abre una luz y toda la gente desconocida, se mueve a dirigir su cuerpo y mirada a un ataúd –Aaah...aaah...aah –Un gran miedo, se apodera de su cuerpo, con un sudor frio que le llena el cuerpo, el intenta de quitar la mirada del ataúd, pero en lo que medio volteo, la gente sin ojos se me acerca y lo llevan a él.

-Suéltenme, suéltenme, suéltenme, SUELTENME-

Empezó a gritar con fuerza, pero al darse cuenta que las personas, le sostenían para ver el ataúd, el cual abrieron y estaba acostada, su madre- ¡¿Que es toda esta mierda?! Mama, mama, MAMAAAAA DESPIERTAAAA-Ella abre los parpados pero resulta que tampoco ella tenía ojos, sino que también le sangraba en ese momento, lo que parecía ser una versión retorcida de su madre, le dio un abrazo y me susurro al oído-.