CONOCIÉNDOTE

Ella

Iba al primer día en secundaria, no sabía que ese sería el comienzo de lo mejor que tengo ahora, era pequeña de estatura y de experiencia, no conocía a nadie más que a mis mejores amigos de la vida, o bueno, hasta esa vida, yo no sabía mucho de ciencia, del amor o de la filosofía, me gustaba leer, pero nada tan complicado como la clase de Literatura de Miss Mercy. Todo se me hizo tan raro aquél día, por suerte llevaba conmigo el amuleto de la suerte que siempre me acompaña, era un gatito de oro que guiñaba un ojo, mi abuela me lo regaló cuando cumplí un año, era un milagro que yo haya nacido, era muy pequeñita, pero bueno.

Encontré a Louisa, la conocía de toda la vida, era muy buena amiga, la mejor de todas, asistimos ambas a la misma primaria y ahora secundaria, eramos inseparables, maldita sea.

El día había transcurrido muy tranquilo, nos sentamos juntas, las mesas eran compartidas, todo fue perfecto aquél día y en el transcurso lo fue también el año.

Hoy termino mi último año de secundaria y todo es tan diferente... Me hubiese gustado que las cosas no hubieran cambiado, me estoy mudando de casa y por consiguiente de colegio también, pienso que todo estará mejor así, entendí que las personas no cambian, que solo mejoran o empeoran, la gente es así, las situaciones son así, viví muchas cosas el anterior año, cosas que no me gustaría repetir nunca más en mi vida, pero lo peor de todo fue haberme enamorado de él, lo peor fue entregar el corazón así, sin más.

Cerré mi diario, preparé mis cosas en mi maleta, guardé las últimas cajas en el carro, me despedí de papá para dar un paseo en bicicleta una última vez por donde siempre acostumbro y ahí estaba él, acompañado de la chica rubia teñida,de la mano, no puedo negarlo, aún no soporto verlo así de arranque con alguien más, pero el tiempo todo lo sana, felizmente no me miró.

Llego a la cafetería y pido un Capuccino.

- Lucy, ¿La pequeña Lucy? ¿Cómo estás?

Es mi tía, no la veo desde la cena de navidad

- Hola tía, he estado bien, no ha sido fácil, pero estoy bien ahora

- Mi nena, sé que todo mejorará, recuerda que no hay problema en que te quedes en mi a apartamento cuando vayas a la universidad, yo estoy encantada

- Si, ya hablé de eso con mamá, está de acuerdo.

- ¿Y como no? es lo mejor, como han estado las cosas, es mejor que te despejes de eso y puedes venirte estas vacaciones a vivir conmigo, hay piscina, atienden a perros cerca, tiendas de ropa que aceptan mi tarjeta, ya sabes

Mi tía era una regia, no tenía hijos, no estaba casada y su reciente pareja era muy rico, pero ella no estaba enterada.

- Lo pensaré, todo me agrada pero no tengo perro tía, solo mis dos gatos

- Ah no te conté, Mitsy, ya tuvo sus crías y solo falta que les salgan las manchas para regalarlos, obvio tendrás uno y para que no extrañe a su mamá podrías quedarte las vacaciones.

-No le molestaría a Bruno¿?

-Que dices, él te adora, no conozco una sola persona a parte de mi claro que le caiga mejor que tu, mi reina

- Bueno, entonces lo consultaré a mis padres

- Ok mi cielo, me llamas, toma.

Me dió dinero con un lazo rojo

- Es para tu nueva vida, es tuyo ahora, eres una bella niña, pero necesitas más que esas converse para caminar, tacones por favor, ya arreglaremos eso en mi depa, llámame