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Las cosas estaban yendo bien, Skay y ello salíamos casi todos los días, mi hermana estaba apunto de graduarse y encima le habían dado un ascenso en su trabajo, pero no parecía que fuera ha moverse de casa.
Era viernes por la tarde, estaba sentado en el sofá viendo una película de Adam Sandler por puro aburrimiento cuando suena el timbre, no tenia que preguntar para saber quién era.
Cuando abrí la puerta ella no dijo nada, solo entro con aire resuelto se quito los zapatos y se tumbo en el sofá.

-Hola Skay, que placer verte, por favor pasa.

Dije sarcásticamente.

-Tu sarcasmo es una mierda.

-Gracias por tu opinión.-Dije intentando mejorarlo pero por su cara deduje que lo había hecho fatal.

-Respuesta incorrecta, deberías haber dicho, 'debo de tener Alzheimer porque no recuerdo haberte pedido tu opinión'

Lo dijo como si soltara esa frase cinco veces al día. Me quede pensativo y un poco fascinado por sus habilidades para hacerme quedar mal, últimamente lo hacia siempre. Me entere que tocaba la guitarra y adivina que, lo hace mil veces mejor que yo, pero la cosa no acaba ahí, también montaba en monopatín mejor que yo, come con palillos mejor que yo e incluso cocina mejor que yo. Pero sorprendentemente no me intimida, es más, me resulta agradable ver como lo hace todo como si tuviera una habilidad mágica o algo, por no decir que siempre se ve increible haciendo cualquier cosa.

-¿Dónde has adquirido tantos talentos si no has ido al instituto?

No deja de mirar al televisor pero me contesta.

-Esa es la cosa, al no ir al instituto tenia mucho tiempo libre por lo que me dedique ha aprender cosas nuevas por mi misma.

-Es impresionante.-Dije maravillado, ella era increíble, era mi amiga y eso me encantaba.

-Yo no lo veo así, yo creo que es triste, una adolescente normal habría estado saliendo con sus amigas y llenado a fiestas, emborrachándose o haciendo alguna locura.

Me pare a pensarlo y en cierta manera tenía razón, pero no se por qué, yo la prefería así. No me habría hecho amigo de el tipo de chica que ella ha descrito, no me hubiera interesado lo más mínimo.

-Si te soy sincero a mi me gustas más así.

Me miro divertida.

-¿De veras Black? ¿Te gusto?

De repente noté como me sonrojaba y retire la mirada, ella parecía mu divertida.

-No...no...no es eso...no es lo que quería decir.-Balbuceé avergonzado.

Soltó una carcajada limpia y larga que seguramente se oyó por toda la casa.

-Ya lo sé-Dijo sonriéndome- Solo te tomaba el pelo.

Entonces me vino a la cabeza una buena respuesta.

-¿La has encontrada ya?

Me miro confundida

-Que si he encontrado ¿Qué?

-Tu gracia.

Volvió a reírse un poco más fuerte y yo la seguí, cuando paramos nos miramos y me dijo.

-Muy buena Black.

Terminamos de ver la película y jugamos unos videojuegos, en lo que me enorgullece decir que soy mejor que ella, nadie vence al soldado solitario.
Sobre las ocho de la tarde se fue a su casa alegando que tenia sueño, pero estoy seguro que estaba cansada de perder.
Me fui a mi cuarto, toque un poco la guitarra, cogí algo de la nevera para cenar y me fui a la cama temprano, no tenia ganas de hacer nada.

Como ella es Donde viven las historias. Descúbrelo ahora