El vecino odioso
🌵Narra Lis🌵
Me encontraba corriendo de un lado a otro de mi habitación. El despertador no me había sonado e iba a llegar tarde. Además, tenía prisa porque Cassie no dio señales de vida hasta el domingo por la tarde y solo nos envió un mensaje:
"Buah, chicas, no os vais a creer lo que os tengo que contar. Mañana hablamos".
Buena forma de empezar un lunes: con prisas e intriga. Suspiré mientras cerraba la puerta de mi casa. Me dirigí hacia el ascensor y vi como se cerraba mientras la persona que estaba dentro no hacía nada por evitarlo. Y por supuesto, esa persona no podía ser otra que la persona más horrible del mundo: Evan, el traidor.
Él había sido mi mejor amigo cuando éramos pequeños, pero se convirtió en un completo idiota y nos dejamos de hablar. Y ahí estaba, permitiendo que el ascensor se cerrase mientras me veía ir hacia él. Aunque pensándolo bien, prefería bajar por las escaleras que estar encerrada con él ahí dentro.🌵
Después de una mañana horrible en la que el profesor de matemáticas casi no me dejó entrar en clase por llegar tarde, por fin estábamos en la hora del deseado recreo y Ally, Cassie y yo nos dirigíamos a la churrería para que esta última nos contase lo que me tenía tan intrigada.
Nos paramos otra vez delante de la puerta y nos quedamos observándola como si fuese un obstáculo imposible de superar.
- ¿No es demasiado pronto para volver? - preguntó Ally - Tal vez se sienta acosado.
- Han pasado cuatro días y además, no te has comportado como una acosadora,- hice una pausa dramática- al menos no de momento, - Ally me fulminó con la mirada y yo me reí - así que no, no creo que se sienta acosado.
-Tiene razón, Ally- me apoyó Cassie.
- Y hoy pido yo, para disimular- agregué
-Está bien, entremos- dijo Ally y abrió la puerta permitiéndonos el paso.
Suspiré y entré, directa a pedir nuestra comida. ¿Y a qué no averiguais quién era el camarero aquel día?
Si habéis pensado en Evan, estáis en lo cierto.
-Eh, ho-hola, yo quería, eh, churros, sí - me salió decir.
Por qué me comportaba como una estúpida, ugh, le odiaba.
- Hola, Elizabeth, cuánto tiempo - me dijo con una sonrisa.
"Me has visto esta mañana imbécil", quise decir pero en vez de eso, solo añadí:
-Y chocolate, tres chocolates y tres churros, por favor.
-Llevamos sin hablar mucho tiempo, ¿no quieres saber qué tal estoy? Porque a mí sí me interesa cómo estás tú.
Me entregó mi pedido mientras decía aquello.
- Sabes perfectamente que si no hablamos no es por mi culpa - me dejé el dinero y me fui con nuestra comida a la mesa.
-Va, por favor Cassie, cuéntanos ya que pasó
- Está bien, os lo contaré todo.
Cassie nos relató cómo pasó la tarde anterior y aunque al principio estaba indignada porque no me dejó a mí ver películas con ella y aún desconocido sí, luego se me pasó. Al fin y al cabo, hablaba de aquel chico como si fuese el amor de su vida y yo me alegraba por ella.
- Ay, es que no me lo creo, fue todo tan mágico - dijo Cassie con una sonrisa nerviosa.
- ¿Y os intercambiasteis los números?
Cassie negó con la cabeza, mientras se iba apagando sus sonrisa.
- Entonces quedasteis para volver a veros, ¿no? - pregunté mientras la sonrisa de Cassie se extinguía por completo.
- ¿Y sabes dónde vive? - preguntó Ally, que al ver la cara de pena de Cassie, añadió: - Bueno, no te preocupes, él sí sabe dónde vives, volverá.
-Eso espero.
Hubo una pausa dramática mientras comíamos los churros hasta que Ally volvió hablar:
- Oye, Lis, creo que has ligado porque el camarero de hoy no deja de mirarte. Ojalá yo el otro día con mi camarero favorito.
Suspiré.
-No, no he ligado. Él es Evan, era mi mejor amigo hace unos años. Rompió nuestra amistad y lleva un tiempo queriendo recuperarla.
- Pero si tú eres incapaz de guardar rencor a alguien, ¿por qué no le perdonas?
- Porque me hizo mucho daño y perdí toda confianza en él. Sencillo: sin confianza, no hay relación.
- En eso tienes razón
- Como siempre - añadí riendo.
- Pero Lis, ¿por qué no nos habías hablado antes de él? - preguntó Cassie extrañada--Se supone que somos tus mejores amigas y él parece importante para ti.
- Lo sois, solo que es una parte de mi pasado que me duele bastante y no me apetecía hablar de ello. Y sí, el fue muy importante por eso me cuesta hablar del tema, algún día os contaré la historia completa. Lo prometo.
-Está bien, lo entendemos--Ally me sonrió.
🌵🌵🌵
El resto del día pasó deprisa, antes de darme cuenta ya estaba volviendo a casa. Me quedaban sólo un par de manzanas cuando escuché una voz gritando mi nombre.
¿A qué no os imagináis quién era? Oh, sí, era Evan. Otra vez.
- Elizabeth, espera, por favor.
- ¿Qué quieres?
- Te quiero a ti.

ESTÁS LEYENDO
Las chicas del churro
Romance¿Qué mejor que ir a comer churros con tus amigas? Encontrar al amor de tu vida mientras lo haces. Será una historia de amor muy dulce, pensaréis. Sí, yo creí lo mismo al principio, pero la vida no es un cuento de hadas. (O eso dicen). ...