kpop one shot's.

broken. | haechan.

— ¿Qué le ocurre? —cuestioné observando al pelirrojo, apartado de todos—.

— No lo sabemos, no quiere hablar. —respondió Mark, suspirando—.

Asentí y me encaminé a él, no tenía nada que perder. Al estar a su lado, me senté frente a él.— ¿Estás bien, Donghyuck?

Él levantó unos instantes la mirada, pero la volvió a bajar, negando.

— Puedes contar conmigo, estaré para ti siempre, ¿sí?. —hablé para comenzar a levantarme, tal vez necesitaba estar solo, más su mano me paró, agarró mi muñeca y simplemente volví a la posición anterior—.

— Diles qué se marchen un momento. —murmuró, soltándome—.

Me giré y le hice una seña a los chicos que enseguida comprendieron, cuándo todos se marcharon y cerraron la puerta volví mi mirada al chico— ¿Qué ocurre?

— Creo que al ser una chica, puedes comprenderme mejor. —calló unos segundos— HyunNeul me dejó. De un día para otro, dejó de quererme.

Sentí presión en mi corazón, ¿cómo se atrevía a jugar con Haechan?

Tomé sus manos, entrelazando nuestros dedos, él me observó algo extrañado, más no hizo el amago de deshacer el agarre.

— Realmente no soy muy buena consejera, pero te diré que no estés mal por ella, aunque suena muy absurdo, ¿no?. Me refiero, esa chica no merece tu tristeza, yah, ¿cómo se atreve a quitarle la sonrisa al carismático y genuino Haechan?, sonríe, sonríe por el echo de dejar un amor tóxico de lado. Y sonríe por los que te apoyamos, no sabes lo triste qué me pone no verte hiperactivo y feliz. ¿Abrazo? —solté sus manos y abrí mis brazos, enseguida noté su cuerpo contra el mío y sus brazos rodear mi cintura, lo notaba, estaba desesperado por un abrazo. Correspondí con todo mi corazón y comencé a acariciar su espalda—.

— Gracias. —susurró—.

Negué— No tienes que dármelas.

Pasamos varios minutos así, en los cuales comprendí: Donghyuck era más frágil de lo que pensaba, era apenas un adolescente, cómo yo, y estábamos llenos de problemas y sensibilidades. Nunca pensé tenerlo totalmente roto entre mis brazos.

Finalmente comenzó a alejarse, limpiándose alguna lágrima que se le había escapado.

(...)

Meses después, nuestra relación era aún más cercana, nos ayudábamos y queríamos un montón el uno al otro.

— Aquí están vuestras botellas de agua. —hablé entrando a la sala, para comenzar a repartir—.

— Pensé que moriría deshidratado. —comentó Jisung, y yo reí—.

— Dramático. —hablé sentándome junto a ellos—.

— Hey, no me robes mi puesto. —se quejó Haechan y Jisung le sacó la lengua—.

"Ya van a empezar" murmuró Mark, haciéndome reír.

— ¿Quién me acompaña a por más agua para que el pequeño Jisung no muera? —hablé levantándome, Haechan levantó la mano y asentí con una sonrisa—.

Salimos de la sala y caminamos hasta una máquina expendedora, esperamos ya que había un chico del staff comprando algo. Unas pisadas llamaron mi atención y levanté mi mirada. Mierda.

Tomé a Haechan y lo atraje a mí, quedando acorralada ya que estaba contra la pared. Mi intención era que él no la viera.

— ¿Qué haces?... —comentó totalmente confundido y sorprendido—.

— No mires... —murmuré—.

Mi petición no sirvió de nada, al contrario, hizo que observara lo que se suponía que no debía mirar. HyunNeul.
Su rostro cambió levemente, a uno más tenso.
Pensaba que se iba a marchar, o incluso agachar la mirada hasta que se fuera.
Sin embargo confirmó que ella le estuviese mirando, para tomar mi rostro y juntar sus labios con los míos.
Mis ojos se abrieron más de lo normal, y mis mejillas comenzaron a arder, y ni hablar de mi corazón, en cualquier momento se salía de mi pecho.

¿Porqué me sentía así?, ¿y más sabiendo que aquello era un simple acto de venganza de Haechan hacia su ex?
Seguramente porque me estaba enamorando de él. Era obvio, me gustaba desde hace un par de semanas.

La chica se marchó, incómoda y algo enojada, más Donghyuck no se separó hasta que nos faltó aire.
Le aparté levemente para salir de aquel acorralamiento, tomé las botellas de agua y comencé a caminar.

— ¿Estás enojada? —oí decir, tras de mí. Simplemente aceleré el paso— ¡perdóname! —exclamó arrepentido, tomando mi brazo—.

Quedé quieta ante su agarre, no tenía otra opción.

— No te enojes, yo... —se rascó la nunca, y decidí hablar—.

— No es enojo, estoy... decepcionada, angustiada. ¿Cómo quieres que esté cuando el chico que me trae loca desde hace semanas me da mi primer beso por una venganza? —exclamé, exploté, solté todo—.

Aproveché que quedó sin palabras para marcharme.

Entré con rapidez en la sala dejando las botellas por ahí, a los segundos entró Donghyuck— ___, necesito hablar contigo. —habló caminando a mí—.

— ¿Para qué? —suspiré, apoyándome en la pared—.

— Escúchame. —pidió dramatizando, cómo un niño pequeño, solo me tapé los oídos. Él tomó mis brazos haciendo que me destapara los oídos— ¡Me gustas!

Espera, ¿qué?. Le observé shockeada. Mientras escuchaba al resto de chicos murmurar un "uuuh".

— No pintamos nada aquí, vámonos. —habló Mark—.

— Pero quiero saber que pas- ¡au!, ya voy. —Jaemin le había pegado en el hombro a RenJun para que saliera—.

Finalmente quedamos a solas, cómo aquella vez.

Haechan suspiró, soltándome— No lo hice por venganza, simplemente mi cuerpo reaccionó así al pensar que ella ya no me importaba y que hacía meses que había encontrado a la chica que me haría olvidarla, perdón.

Agaché la mirada, era una tonta.

— pensé que te enojarías porque no sentías lo mismo que yo, siempre me has tratado como un hermano.

Le abracé sin previo aviso— me gustas mucho, Donghyuck-ah.

Noté su sonrisa, mientras correspondía mi abrazo, alcé mi mirada, estaba levemente sonrojado.

— Yo también me gusto, soy el mejor. —bromeó—.

Ese era el Haechan que me conquistó.