El temor de verla partir

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El profesor Snape golpeó la puerta de la habitación de Ivonne, llamándola.

Oyó la puerta destrabarse y abrirse levemente. Él entro y vio la dama rubia hundida en su cama.

Se acercó, algo preocupado y notó los pañuelos desechables, las gotas de sudor en su frente, los ojos algo hinchados, la palidez de la piel, los labios algo azulados y la nariz roja.

- Hola grandote- Lo saludó ella, fingiendo buen humor pero con una voz muy congestionada.

Él tomó un pañuelo limpio y secó su sudor, luego colocó su mano en la frente.

El resultado era muy claro: fiebre, y demasiado alta.

Se sentó en la cama, silencioso, mientras la miraba. Era inteligente y ya había visto esa enfermedad antes. También había visto las consecuencias de eso...

- No te hizo bien el cambio de clima, por lo que veo- Dijo él, pensativo.

- Estoy bien. Solo un levísimo resfriado. No me levanté antes por que no pensé que era tan tarde- Ella seguía fingiendo mientras intentaba sentarse.

- No seas... terca- La regañó mientras impedía que se sentara- Y deja de fingir, que lo haces pésimamente.

- Bien, bien...

- ¿No puedes pasar demasiado tiempo sin preocuparme?- Le preguntó mientras tomaba una de sus manos, notándola muy caliente.

- Es que busco llamar tu atención- Bromeó con una gran cantidad de verdad oculta.

- Iré a ver que consigo para que te cures... Tu solo quédate aquí.

Él rápidamente dejó el cuarto y se dirigió a la sala común.

Dumbledore lo vio aparecer y notó la preocupación en su rostro.

- ¿Qué tiene?- Le preguntó el anciano.

- Gripe. De las graves.

Minerva se puso de pie y caminó rápidamente hacia el cuarto de Ivonne.

- ¿Qué tan grave?- Le preguntó nuevamente Albus, detrás de sus lentes de media luna.

- Esta muy pálida y tiene fiebre muy alta. Tengo que conseguir una poción muy fuerte para eso y no se si hay de esas aquí.

- ¿Un Referaux?

- Un Aliento de los Cielos.

Dumbledore se levantó. Que Severus considerara un Aliento de los Cielos, solo cuadraba con algo realmente peligroso.

- Jamás pensé que se enfermara de Vapralif... ¿Con los elementos necesarios podrías hacer la poción?

- Si. Pero toma dos días para que este listo. Hay que conseguir los ingredientes ahora mismo.

- ¿Cuáles?

- Referaux, Aire del Líbano y Fereith.

- Remus, Sirius- Llamó el director- Vallan a la ciudad y traten de conseguir un Aliento de los Cielos. Si no, traigan esos tres.

El par salió rápidamente, rumbo a Laurest, la cuidad de magos que descansaba colina abajo.

- No te preocupes Severus- Albus le puso una mano en el hombro al notarlo demasiado afectado- Ya veras como en un par de días, ella estará bien.

- Sino... No se que haré...

El renombrado Snape fue lentamente a la habitación de Ivonne, cruzándose a Minerva en el camino.

Le Voyage | SSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora