Chloe, secretos de una chica "superficial" [Nathloe/ Lukloe] [Terminada]

Capitulo 20: Emilie Agreste y Audrey Bourgeois

Audrey Bourgeois se crió en una calle vieja de Marsella, siempre renegando de la fea vida que tenía.

Y es que el dinero en su familia nunca fue su fuerte.

Sus padres, unos vendedores ambulantes, siempre pasaban tiempo fuera de casa, Audrey cuidaba de ella misma en toda ocasión.

Su educación era limitada, 3/5 asistía a la escuela por falta de dinero.

Odiaba su vida.

A los 17 años, había pensado en varias veces quitarse la vida.

-Audrey, toma - su madre le tendió un pasaje de tren a París

-Mamá pero esto es mucho, ¿Cuánto te costó? - pregunto tomando el pasaje

-Solo vete Audrey, ve a cumplir tu sueño, ve a ver a la vieja Eiffel, hazlo por nosotros - su padre desde la habitación oía las voces de su familia

-Madre, mi padre está grave, yo no los puedo dejar aquí - comenzó a llorar, odiaba su pobreza, si, pero amaba a sus padres, era lo único que tenía, eso la mantenía con vida 

-Audrey, sé que lograrás mucho, ya vete porfavor - su madre lloraba, le rompía en corazón

-Solo dame 15 minutos - entro a la habitación donde estaba su padre, el hombre llevaba una sonrisa grande y su cuerpo tapado por sábanas blancas -Hola papá, ¿Te sientes bien? - le pregunto sentándose al lado de su progenitor

-Cariño, claro que sí, ¿Te dio mamá lo que te compre? - la joven afirmó con la cabeza - mi sueño fue París, y te lo herede, ahora ve y cuando ya estés ahí, sabré aquello

-Gracias padre - le dejó un beso en la frente y salió hacia su habitación.

Tomo su única maleta, la cual usaba para la escuela también, y unos libros, el dinero que pudo ahorrar, además de cosillas que le recordarán a su familia.

-Audrey, lo lograrás cariño - su madre le entrego un poco de dinero y ella pudo salir feliz de su casa

Camino hasta la estación de tren, sería un viaje largo.

Al entrar a su medio de transporte se sentó al lado de la ventana, puso su maleta debajo de ella, al igual que su cartera pequeña donde llevaba lo básico.

15 horas sentada en el tren le causó un dolor terrible de espalda.

"Estoy bajo París en este momento" pensó ella.

Subió lentamente a la ciudad y vio como todo era distinto, era magnífico según describían sus gestos.

Comenzó a caminar por las calles para poder averiguar dónde quedarse.

-Je suis désolé - un joven de Cabello rubio platino tropezó con ella

-No, yo lo siento - la ayudo a levantar sus cosas - ¿Eres de aquí?

Ella tímidamente negó, le daba vergüenza no ser parisina.

-Vengo de Marsella - susurro

-Es un hermoso lugar, ¿Encontraste lugar donde quedarte? - le pregunto

Ella comenzó a verlo, ojos azules, alto, piel blanca y su cabello, le gustaba mucho su cabello.

-Estaba por ver un hotel por aquí - enunció tristemente

-¿Te parece si te quedas una noche en mi casa? Es pequeña para ti y para mí, pero es acogedora, Comment vous appelle? - pregunto su nombre

-Je m'appeler Audrey, et vous ? - el sonrió y comenzó a caminar con ella

-Je m'appeler André Bourgeois - ambos caminaron por la fría noche de París

***

-Emilie, te dije que no debes hacer eso, ¿Cuántas veces vas a entender? - la dueña de la casa le gritaba sobre su mala labor en los quehaceres del hogar

La señora Agreste era mortificadora, y solo se aprovechaba de la riqueza de su falso matrimonio.

-Lo siento señora, yo solo quería cambiar algo pequeño - la vieja salió de la habitación y Emilie continuo limpiando

-Hey, Emilie - susurro Gabriel llamándola - ven un momento

Pero lo bueno de trabajar en esa casa era Gabriel, siempre caballeroso y estudioso.

-Digame señor Agreste - el joven de cabello plomo y ojos del mismo color la abrazo -Tu madrastra me va a matar si nos ve asi

Sinceramente a Gabriel no le importaba, ella no le sumaba ni restaba.

-No me importa, quiero pasar más tiempo conmigo, ¿Por qué no nos vamos de aquí?

-Sabes que necesito el empleo para poder estudiar mi universidad - volteo, dándole la espalda a Gabriel, volvió a limpiar

-Podemos huir a París y trabajar para lograr algo, no hay razones para que te quedes, ni mi padre, ni el dinero - la abrazo por detrás; olió su rubio cabello, le encantaba como olía a manzanilla 

-Solo déjame un tiempo, porfavor - El joven asintió

-Tienes hasta media noche, antes de la hora vendré a saber tu decisión - ella asintió

Él le guiñó el ojo y ella sonrió tímidamente.

Tenia la oportunidad de escapar con el amor de su vida a París, donde estudiaría y trabajaría.

Pero, como le diría a Gabriel que esperaba un hijo de él.

Tenía solo 17 años, no podía dejar atrás su sueño.

Continuo sus labores del hogar, aguantando las náuseas y otras inquietudes típicas del embarazo.

Se había enterado de aquello hace 2 meses, pero no tenía la valentía de decirle a Gabriel, no por ahora.

Además que el era mayor, ya estaba por terminar su carrera como diseñador.

Él tenía 21 años, apostaba todo a que su familia jamás la aceptaría.

11:46 PM.

Gabriel bajo a la cocina, Emilie continuaba limpiando.

-Gabriel, vamonos, ya lo decidí - sonrió y después de tanto pensarlo se había dado cuenta sobre la libertad que tendría fuera de esto, y su libertad costaría, pero la disfrutaría

-Solo dame un poco de tiempo, nos iremos - le dio un beso en la labios y salió de la habitación

Emilie bajo rápidamente a su habitación en el sótano, donde comenzó a guardar su ropa y dejó una carta para la madrastra de Gabriel y otra para el padre de él.

Gabriel llegó con varias maletas, mientras que Emilie solo llevaba 3, las cosas que había llevado consigo cuando llegó a su casa.

-Gabriel, hay algo que tengo que decirte antes de irnos - ambos se sentaron en la cama de la rubia

-Claro, dímelo - le tomó ambas manos y ella se puso de pie, pero perfil

Tomo sus manos y hundió su vestido y mandil, dando a conocer su barriga de embarazo.

Gabriel no entendió al principio, pero a medida que ella le hacía gestos, él se puso de pie y la abrazo con fuerza.

-Vamos a ser padres Emilie - la cargo y le dio un beso en los labios - no te dejaré nunca

Después de esa noche ambos salieron hacia otra vida, los nuevos señores Agreste, eran unidos.