●●●

685 75 39
                                    

Desde que tengo memoria, siempre e odiado mi nombre.

¡Por los santos cielos! ¿¡Quién le pondría un nombre así a su hijo!?

Cada vez que pienso en eso me enojo. Siempre fui víctima de bullying por ello, pero pensándolo mejor, ellos eran los idiotas, era un simple nombre.

Cada vez que le preguntaba a mi madre:

-Mamá, ¿por qué me llamo así?

Ella sólo señalaba mi espalda mientras sonreía, y al yo ser tan pequeño y estúpido nunca entendí porque lo hacía.

Un día simplemente me harte de las respuestas de mi madre y como lo haría casi todo el mundo, busque el significado en internet. Mala idea.

-¿Sexy, misterioso, chico malo? ¡Qué mierda es esto!

Digamos que ese día me quede sin computadora.

¡Pero tenía mis razones! ¡Yo no soy misterioso, solo serio, tampoco soy un chico malo! Sexy si soy, eso lo admito, pero lo demás ni de joda.

Desde ese día odie aun más mi nombre.

Hasta que los conocí a ellos, esos once imbéciles me cambiaron la vida por completo.

Aries, el enano que se creía líder, mi vecino y amigo de la infancia, lo conocí a los diez cuando salí a botar la basura, él se había mudado y como si nos conociéramos de años se acercó a saludarme, me impresionó que también tuviera un nombre raro.

Tauro mi, ahora, mejor amigo, yo solo salí al supermercado a comprar leche y me encuentro con un chico repleto de chocolate que huía de su madre, descubrí su nombre y que estudiábamos en la misma escuela. En ese entonces yo tenía catorce y el doce. Ni me acuerdo como me hice su mejor amigo, solo dijo que eramos algo así como polos opuestos y yo simplemente me deje llevar, no podía ir en contra de personas menores que yo, es como una maldición ya que siempre caía ante su carita de perrito mojado.

Géminis, la historia es larga así que la resumiré un poco, literalmente era el día de las mostraciones de clubes y el me arrastró aun sin conocerme al club de drama. Desde ese día no paro de acosarme y a Aries y Tauro para que entraramos al club de drama. Aceptamos por culpa de Tauro.

Cáncer, a él lo conocí junto a Piscis en la guardería de niños, nos volvimos a reencontrar cuando mi madre se pudo comunicar con la de ellos y descubrió que vivíamos en la misma vecindad. Ellos dos se volvieron chicles y yo ni siquiera me había acordado de su existencia.

Leo lo conocí en un centro comercial, estaba trabajando a medio tiempo vendiendo churros y el no sabía si escoger el de Oreo o uno normal. Al final le termine pagando dos churros para que cerrará la boca y el muy imbécil me dio su número de teléfono al pensar que le estaba coqueteando. El único con el nombre "normal".

Virgo, el delegado de nuestra clase, a él lo conocí junto a Capricornio ya que era su novio y Capricornio era el líder del equipo de baloncesto en el que estaba y nos volvimos buenos amigos.

Libra, el hermano menor de Leo, este me lo presento al insistir tanto y termine descubriendo que Leo era mayor que yo y que Libra estudiaba dos salones al lado de el mio. También descubrí que tenían un amor incestuoso por el cuál Sagitario no dejo de "fangirlear".

Y hablando de Sagitario, lo conocí ya que él también estaba en el grupo de baloncesto y en una gira nos tocó ser compañeros de cuarto, fue perturbador, descubrí sus mangas de yaoi y él no paraba de shippearme con todo lo que se movía. Cuando le pregunte que si era gay nunca me respondió.

Acuario, el rato de la clase, en un proyecto de ciencia nos tocó juntos, algo que en ese me puso los pelos de puntas, pero cuando llegue a su casa era normal, un cuarto repleto de platillos y planes para "dominar el mundo". Un completo freeky con el cual pase la clase con A+ gracias al proyecto, todavía le debo una.

Todos esos retardados mentales y gays que se terminaron volviendo mis amigos, todos de nombres raros y de marcas de nacimiento que explicaban el echo de nuestro nombres.

El mio era...

-¿Escorpio? ¿Qué haces?- murmuró mientras bostezaba.

-Estaba escribiendo, me interrumpiste en la mejor parte, fruncio el ceño fingiendo estar enojado.

-Yo, eh, lo siento, no te quise interrumpir.

Él es Tauro, mi mejor amigos y mi novio, un completo despistado que se quedo dormido en mi cama al estar esperandome para ir a reunirnos con todos los chicos.

No, no soy gay, solo lo amo a él, eso no me hace gay...

-No te preocupes- le despeine el pelo, el cual ya estaba más que alborotado, y le di un corto beso en la cien.- Bueno, vamonos, los chicos ya deben estar esperándonos.

-De acuerdo- intento acomodarse un poco el cabello y se acercó conmigo a la puerta.

Bueno, creo que al final no odie tanto mi nombre, sin él, nunca hubiera conocido a estos idiotas.

Hasta luego, Escorpio se despide.

●●●










●●●
No pude evitarlo, amo a Escorpio y me estaba bañando y ¡puff! Se me ocurrió esto.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 27, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

N a m e.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora