Atsushi y Akutagawa habían tenido a los gemelos y la primera semana fue infernal para ambos, los gemelos eran completamente activos y ni hablar del cambio de pañales, Akutagawa llego a estresarse pues después de eso, Atsushi seguía sensible aunque ahora ya no discutían, no tenían tiempo de pelear y mucho menos de quejarse, cuando lograban dormir no importaba nada más que encontrarse el uno al otro en la cama, eso arreglo mucho sus actitudes, era como ver a Hinata a y Kazumi decir "de nada padres" eran su eterna bendición y felicidad.
Con el primer año de los gemelos Atsushi y Ryunosuke pudieron relajarse más, bueno "relajarse" Ya que los gemelos comenzaban a correr y aunque Kazumi se sostenía e intentaba caminar como un niño normal que no se quiere golpear, Hinata intentaba correr y se caía por todos lados, Rashoumon siempre estaba al pendiente de Hinata al igual que los padres.
Hinata era una niña de cabellos blancos largo (claro, a la altura de lo que creció para su edad de un año) de ojos grises y una gran sonrisa. Mientras Kazumi era un chico de cabello blanco cortos y ojos grises, con una mediana sonrisa, era algo serio pero sonreía igual que su hermana menor
Aquella vez iban en viaje familiar para celebrar el cumpleaños de los gemelos, Hinata y Kazumi iban en los asientos de atrás con el seguro para bebes, mientras Atsushi cantaba una canción para ellos y Akutagawa, bueno solo conducía, no acostumbraba a cantar si estaba Atsushi, si no el albino pedía más y más y eso terminaba como una locura. Una vez más aquella cafetería los había recibido ahora con sus bebes, está vez habían pedido cuatro rebanas, dos cafés, dos vasos de leche y dos sillas para bebes.
- Ryu, ¿le darías a Hinata? – pregunto el albino mientras le daba una cucharada de pastel a Kazumi
- Sé que querías darles chocolate pero el doctor dijo
- El doctor dijo que al año podían comer chocolate, ya lo habíamos hablado
- Sí, pero... ¿no quieres esperar?
- Quiero celebrar el cumpleaños de mis bebes – dijo el albino haciendo un puchero y Akutagawa no pudo evitar reír
- Está bien – dijo sonriendo – te consiento demasiado
- Si me consintieras ya le hubieras dado pastel a Hinata
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My Cure - Shin Soukoku
FanfictionPor que vivimos en un mundo donde llega una oportunidad, escala por los engranajes del malestar hasta la locura que otorga la felicidad... ¡Una vez más un Shin Soukoku!