ASESINA

Capítulo 1: Karma

Capítulo 1.

Skylar Evans se encontraba sentada en el escritorio de su gran imperio, su gran KARMA. Es simple la forma del porqué le puso así, y es que quizás no tenía ganas de comerse la cabeza, pensando en un nombre para un Cártel que cause miedo.

Para ella lo importante no era el nombre, podría ser uno inofensivo, la diferencia está, cuando un nombre común y corriente te da escalofríos por la historia, por lo que hay dentro. Al fin y al cabo un nombre solo se queda en eso; un nombre. Aunque era extraño porque no pensaba en lo mismo cuando escuchaba "Skylar".

Ella era alguien prácticamente feliz por todo lo que había logrado hasta el momento, pero quería seguir aumentando su poder al máximo y convertirse en la mafiosa más respetada de la mafia norteamericana.

Para Skylar nunca es suficiente, siempre quiere más y consigue lo que quiere de la manera que sea, no le importa cuál sea el costo de eso, si está dentro de lo que desea, vale la pena arriesgarse.

Sus padres murieron hace mucho tiempo, por consecuencia, junto a sus hermanos no les quedo otra que empezar dos imperios.

Theo, su hermano mayor, manejaba el otro, su imperio no se comparaba con el de ella, lo de él eran las carreras clandestinas. Aunque con Skylar no se llevaban del todo bien, ella pensaba que él era un inepto, un incompetente. Y él pensaba que ella era una amargada incapaz de amar a alguien.

A Bree nunca le gustó estar al mando, ni mucho menos estar metida lo relacionado a la mafia. Tampoco estaba de acuerdo con la violencia, tenía sus convicciones e ideales totalmente intactos. Su moral era completamente distinta a la de Skylar, por lo que estudiaba psicología en la universidad de Miami. Ella era alguien de bajo perfil, eso le daba a Skylar la responsabilidad de hacerse cargo y ayudarla a seguir sus sueños.

Skylar no creía mucho en eso de los sueños, que al soñar mucho se cumplen y listo, la vida se te arregló por soñar. Ella creía solamente en la perseverancia y no dejarse vencer por nada en el mundo.

Dentro de sus personas importantes se encontraba Micah, un chico lleno de tatuajes, ojos grises expresivos y aterradores, él era su perro fiel, siempre demostró respeto hacia ella. Él hacía todo lo que Skylar le decía, pero también tenía libertades. Micah era el segundo jefe, el que daba las órdenes cuando la jefa no estaba.

Ella pensaba que toda su vida se la debía a KARMA, no cambiaría nada de lo que ha vivido, porque ha formado la persona que es ahora. Que le digan asesina para ella no es un insulto, al revés es un cumplido. Mata porque quiere, porque puede y porque es su deber, lo que los demás digan realmente le importa un carajo.

Skylar salió de sus pensamientos cuando escuchó la puerta. Gritó un pase. Eva, una de las mujeres que trabajaba para ella y su fiel amiga, entró junto a Ziggy, otro de sus hombres.

—¡Jefa tenemos noticias! —exclamó Ziggy con un tono desesperado y Skylar levantó una ceja con cierta incertidumbre—estábamos en el operativo y un idiota nos vio matar al hijo de puta de Russo.

—¡Mierda! —golpeó la mesa con fuerza provocando que los vidrios del ventanal retumbaran—¡Tráiganlo ahora! —ordenó con autoridad—¡Lo quiero vivo! —les hizo una seña con su mano para que se retiraran.

—Como ordene jefa —habló Eva sin ninguna expresión en su rostro y rápidamente se retiraron.

Cuando cerraron la puerta, Skylar se paró de la silla y comenzó a caminar por toda la habitación. Estaba realmente nerviosa, caminaba de un lado a otro sin dirección y sentía como la presión del pecho le subía. Los nervios solo aumentaban más y más, y ni hablar de cómo su mentón comenzó a temblar, sin indicios de terminar.